Las tensiones están aumentando entre Ucrania y Rusia a medida que Ucrania lanza ataques con aviones no tripulados contra refinerías de petróleo en territorio ruso. Estos ataques selectivos tienen como objetivo debilitar la economía rusa y reducir su potencial financiado con petróleo, antes de la posible reelección del presidente Putin.
Los objetivos de estos ataques incluyen importantes refinerías en Riazán, Kstovo, Kirishi y Novoshakhtinsky, lo que provocó daños a la propiedad e interrupciones comerciales. Estas acciones agresivas se producen en medio de la guerra en curso y muestran la determinación de Ucrania de debilitar la maquinaria de guerra rusa.
Estos ataques aéreos provocaron incendios y destrucción en las refinerías objetivo, provocando pérdidas económicas a Rusia. Además, grupos proucranianos han afirmado haber tomado el control de pueblos situados en Rusia, aumentando la presión sobre el régimen de Putin.
Mientras Rusia se prepara para una elección presidencial en la que se espera la reelección de Vladimir Putin, estos ataques resaltan el impacto directo de la guerra sobre el pueblo ruso. Las consecuencias de estas acciones podrían influir en la opinión pública y poner en duda las políticas del gobierno ruso.
En resumen, estos ataques con aviones no tripulados de Ucrania contra refinerías de petróleo en Rusia ponen de relieve la escalada del conflicto y el esfuerzo de Ucrania por debilitar a su vecino. Estos recientes acontecimientos podrían tener repercusiones en la política internacional y la dinámica regional en las próximas semanas.