Los acontecimientos recientes en Guinea han puesto de relieve la grave crisis energética que enfrenta el país. La dimisión de Camera, al frente de Electricidad en Guinea (EDG), así como las de sus adjuntos Fode Soumah y Abdoulaye Kone, por decisión del general Mamady Doumbouya, demuestran la magnitud de los problemas de esta empresa pública. Al mismo tiempo, el director general de la compañía petrolera nacional y su adjunto también fueron despedidos en relación con los continuos cortes de energía.
Las protestas que estallaron en Conakry tras estos interminables cortes de energía exacerbaron las tensiones y provocaron actos de violencia trágicos, como la muerte de dos niños en Kindia. Los guineanos exigen explicaciones y asumen responsabilidades de las autoridades interesadas. El Primer Ministro, Amadou Oury Bah, insistió en la necesidad de que todos reconozcan su parte de responsabilidad en esta situación crítica.
La EDG, por su parte, mencionó un incidente en una torre de alta tensión como causa del corte, pero la población se muestra escéptica ante esta explicación. La situación actual pone de relieve la urgencia de reformas profundas en el sector energético en Guinea, para garantizar un suministro estable y fiable para todos los ciudadanos del país.
Las recientes decisiones tomadas por las autoridades guineanas de sancionar a los responsables de los cortes de electricidad demuestran la voluntad de poner fin a esta crisis y restaurar la confianza de los ciudadanos. Ha llegado el momento de actuar concretamente para resolver los problemas estructurales que obstaculizan el buen funcionamiento del sector energético en Guinea.