En una reunión reciente entre el representante Abubakar Fulata, presidente del Comité de Educación Universitaria de la Cámara de Representantes, y funcionarios del Sindicato de Personal Superior de Universidades Nigerianas (SSANU), así como de la Asociación Nacional de Tecnólogos Académicos (NAAT) en Abuja, Se tomó una decisión crucial. Mohammed Ibrahim, presidente de SSANU, expresó el descontento de los sindicatos por el impago de los salarios retenidos en 2022.
A pesar de la exención concedida por el presidente Bola Tinubu y su directiva para el pago de cuatro meses de salario retenido tras la huelga de 2022, el Ministerio de Educación y la Contraloría General de la Federación no han respetado este acuerdo. Esta situación ha llevado a los sindicatos a considerar una huelga indefinida si el gobierno no responde a sus demandas.
Ibrahim destacó el hecho de que ASUU, su contraparte, ya había recibido su pago y cuestionó la diferencia de trato. Por su parte, el presidente de la NAAT, Ibeji Nwokema, también expresó el incumplimiento de los acuerdos de 2009 y 2017 por parte del gobierno.
Tras esta reunión, el diputado Fulata pidió a los sindicatos suspender su aviso de huelga mientras la Cámara de Representantes examina en profundidad las cuestiones cuando reanude sus actividades. Aseguró que se tomarán las medidas apropiadas para resolver los temas pendientes.
Si bien SSANU y NAAT terminaron recientemente una huelga de advertencia de siete días por falta de pago de salarios retenidos, aún persiste la posibilidad de una huelga indefinida si no se cumplen las demandas. Los miembros de ambos sindicatos se movilizaron para corregir la situación y garantizar los derechos de los trabajadores universitarios en Nigeria.