En una decisión crucial, el juez I.A Jamil emitió un veredicto en el caso HCL/68/M/2020 en Lokoja el miércoles, después de dos horas de deliberación.
El juez declaró que cualquier infracción de los derechos fundamentales del ex gobernador Kogi, Yahaya Bello, es inválida a menos que el tribunal lo autorice específicamente.
«Con esta orden, la EFCC queda prohibida de arrestar, detener y procesar al solicitante. Esta es una orden definitiva tras una orden judicial provisional previa», afirmó.
Bello, ex gobernador de Kogi, presentó una denuncia ante el Tribunal Superior del estado, alegando una violación de sus derechos fundamentales por parte de la agencia anticorrupción. En su solicitud, pidió que se le impidiera a la EFCC arrestarlo, detenerlo y procesarlo de manera injusta.
En respuesta a la petición de Bello de protección de sus derechos fundamentales ante la EFCC, el tribunal determinó que los demandados no podían perseguir al peticionario a menos que tuvieran pruebas sólidas después de una investigación adecuada.
Respecto a la cuestión de competencia cuestionada por la EFCC, el juez la desestimó y declaró que el tribunal tenía jurisdicción para considerar la solicitud.
Esta decisión marca un hito en el caso y subraya la importancia de proteger los derechos fundamentales de cada individuo, incluso frente a las autoridades gubernamentales y judiciales más poderosas. Destaca la necesidad de un poder judicial independiente e imparcial que garantice justicia para todos.
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