Bajo el liderazgo del Ministro de Finanzas de Nigeria, Wale Edun, el país ha anunciado su intención de solicitar préstamos por un total de 2.250 millones de dólares al Banco Mundial. Esta decisión se produce después de las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial en Washington D.C. El gobierno nigeriano también planea emitir bonos de la diáspora a finales de este año para atraer divisas al país.
Los préstamos solicitados al Banco Mundial se dividirían en 1.500 millones de dólares para apoyar políticas de desarrollo y 750 millones de dólares para financiar programas con resultados concretos. La solicitud será evaluada por el consejo de administración del Banco Mundial en junio, según anunció el ministro Edun.
Nigeria se enfrenta a desafíos económicos, como la escasez de divisas que ha provocado la devaluación del naira frente al dólar este año. Sin embargo, el país ha logrado recuperarse en cierta medida. Además, Nigeria enfrenta una alta deuda, altos niveles de desempleo y un financiamiento significativo por parte del banco central, aunque el gobierno ha informado recientemente que ha reducido a la mitad su deuda con el banco central.
La búsqueda de financiamiento externo destaca la importancia de abordar los retos económicos que enfrenta Nigeria y fortalecer su estabilidad financiera. Estas medidas buscan respaldar la recuperación económica y atraer inversiones extranjeras necesarias para el desarrollo sostenible del país. En un contexto de incertidumbre económica global, es fundamental que Nigeria explore todas las oportunidades de financiamiento disponibles para garantizar su resiliencia económica a largo plazo.