Los recientes acontecimientos en el seno de la Asociación de Pesca de la Cuenca del Lago Chad han provocado una ola de protestas de sus miembros, que acusan a la dirección actual de permanecer en el cargo durante 21 años en lugar del máximo de ocho años previsto por los estatutos de la asociación. Los manifestantes exigen la celebración de un congreso para determinar el futuro de la asociación y la organización de elecciones anticipadas.
Según el portavoz de los manifestantes, Abdullahi Bako, su exigencia es simple: la creación de un congreso para decidir el futuro de la asociación y la organización de elecciones transparentes. Instan al gobierno del estado de Borno a intervenir, diciendo que el liderazgo actual de la asociación ha superado todos los límites. Según ellos, los líderes hicieron la vida difícil a muchos miembros, obligando a algunos de ellos a trasladarse a Adamawa y Jigawa.
Se han formulado graves acusaciones contra los dirigentes actuales, incluida la restricción de la venta de pescado del lago Chad en el mercado sólo a miembros seleccionados, la imposición de impuestos exorbitantes y la falta de presentación de recibos de los pagos realizados. Además, se desconoce el paradero de más de 200 millones de naira de fondos de la asociación y no se ha convocado ningún congreso para responsabilizar a los dirigentes.
El presidente del comité de antiguos alumnos de la asociación, Alhaji Bukar Shettima, pidió al gobernador Babagana Zulum que intervenga personalmente en el asunto, denunciando la ineficacia del comité creado por el gobierno para trabajar en colaboración con la actual dirección de la asociación. . Acusó a este comité de actuar como intermediario y controlar la industria pesquera, en perjuicio de sus miembros.
La situación ha provocado una grave crisis en el mercado pesquero, con una fuerte reducción del número de camiones de pescado transportados cada día. Los miembros de la asociación han observado un deterioro de sus condiciones de vida desde 2020, lo que repercute en los ingresos de los comerciantes y en los ingresos fiscales del Estado.
Ante estas acusaciones, un miembro de la actual dirección, que habló bajo condición de anonimato, pidió calma y prometió responder a todas las acusaciones. Mientras tanto, se han desplegado fuerzas de seguridad en el mercado para mantener el orden.
Estos acontecimientos recientes revelan las profundas divisiones dentro de la Asociación de Pesca de la Cuenca del Lago Chad, destacando la necesidad urgente de una reforma y una transición hacia un liderazgo más transparente y responsable. Es fundamental que las autoridades competentes intervengan rápidamente para resolver esta crisis con el fin de garantizar la estabilidad y la prosperidad de este importante sector económico.