En la provincia de Maniema, la cuestión de la presencia militar en las minas del territorio de Lubutu suscita preocupaciones legítimas entre la población. La Sociedad Civil de Maniema, a través de su filial Lubutu, hace sonar la alarma y pide a las autoridades político-administrativas que reaccionen urgentemente ante esta preocupante situación.
Los resultados son alarmantes: los soldados están tomando poco a poco las zonas mineras, poniendo en peligro la seguridad y la paz de los habitantes. Los ciudadanos pacíficos de los territorios de Masaba, Nzigida, Kilomoto, Cholo, Magiatani, Etogo y otras localidades son víctimas de múltiples formas de violencia e intimidación. Los informes indican actos de represión, abuso físico y tortura, que atestiguan una flagrante violación de los derechos fundamentales de estas poblaciones.
Ante esta desastrosa situación, la sociedad civil de Maniema, representada por su presidente Mutoro Mumbere Jean-Pierre, pide una reacción inmediata de las autoridades competentes. Es imperativo que las autoridades político-administrativas locales, provinciales y nacionales tomen medidas concretas para poner fin a estos abusos. La impunidad de la que parecen disfrutar estos soldados es inaceptable y debe terminar sin demora.
Es fundamental que el Ministro de Defensa se ocupe de este asunto y tome las medidas necesarias para garantizar la protección de las poblaciones civiles y la seguridad de los sitios mineros. Además, es esencial una investigación exhaustiva de las acciones de las fuerzas armadas en esta región para esclarecer las responsabilidades y garantizar que tales violaciones de derechos humanos no se repitan.
La sociedad civil, como voz del pueblo, transmite las quejas y el sufrimiento de los ciudadanos. Es fundamental que las autoridades políticas respondan a este urgente llamamiento para restablecer la paz y la seguridad sociales en la provincia de Maniema. Existe una necesidad urgente de actuar, y la protección de los derechos de las personas debe ser una prioridad absoluta para cualquier sociedad democrática que respete el Estado de derecho.