En África, los recientes cortes masivos de Internet causados por cables submarinos dañados han causado perturbaciones en varios países. Costa de Marfil se ha visto muy afectada, con Orange y MTN entre los operadores más afectados. Se está buscando soluciones alternativas para restablecer la conectividad.
Otros países, como Liberia, Burkina Faso, Guinea y Ghana, también se vieron afectados por estas perturbaciones. El origen de los daños en los cables aún está por determinar, y las hipótesis apuntan a un deslizamiento de tierra submarino relacionado con movimientos sísmicos.
Las consecuencias económicas de estos cortes de Internet ya son perceptibles. En varios sectores se están registrando pérdidas de ingresos y dificultades operativas. En Ghana, por ejemplo, las actividades comerciales y administrativas se han visto muy afectadas.
Es esencial subrayar la importancia de estas infraestructuras de comunicación en África, donde muchos países dependen en gran medida de Internet para sus intercambios comerciales, administrativos y sociales. Los esfuerzos para restaurar la conectividad y desarrollar la resiliencia de la red son esenciales para mitigar el impacto de tales interrupciones en el futuro.
Como sociedad conectada y dependiente de Internet, estas interrupciones resaltan la importancia de diversificar los canales de comunicación e implementar salvaguardias para garantizar una conectividad estable y confiable, incluso en caso de incidentes importantes.
Con estos acontecimientos recientes, es esencial que los gobiernos y los operadores de telecomunicaciones trabajen juntos para fortalecer la infraestructura y garantizar una conectividad a Internet sólida y resiliente para todos.