Fatshimetrie – La crisis migratoria en El Amra, Túnez: sueños de Europa y realidades desesperadas
En el corazón de la ciudad costera de El Amra, Túnez, inmigrantes del África subsahariana expresan su deseo de ser liberados para llegar a Europa, mientras aumentan las tensiones en el país por la gestión gubernamental de la crisis migratoria.
En remotos olivares, los campos de inmigrantes son testigos de las luchas que enfrentan muchas personas que sueñan con una vida mejor en Europa.
Entre ellos se encuentran inmigrantes malienses, exhaustos y desesperados, cuyos rostros muestran las marcas del cansancio. “Aquí no hay trabajo. No es fácil encontrar comida”, dijo Defao, un migrante maliense. «Lo único que queremos es que nos dejen ir, nos iremos», añadió.
Un migrante de Burkina Faso buscaba un salvoconducto y no quería quedarse en Túnez. «Hay guerra en nuestros países y estamos aquí sólo para cruzar y salvar a nuestras familias», dijo Zilé Inoza. “Desde que estamos aquí no hemos hecho nada malo. Simplemente pedimos que nos dejen pasar”, añadió.
Dernière étape pour beaucoup de ceux qui rêvent d’une vie meilleure en Europe, El Amra et Jebeniana voisine reflètent les problèmes complexes auxquels est confrontée la Tunisie, un point de transit clé pour les migrants venant de Syrie, du Bangladesh et de diverses nations d ‘África subsahariana.
Las fuerzas del orden han aumentado su presencia en las dos ciudades agrícolas, donde alrededor de 83.000 tunecinos viven junto a un número creciente de inmigrantes de todo el mundo.
Cientos de tunecinos marcharon por las calles de Jebeniana este fin de semana, exigiendo que el gobierno tunecino deporte a los inmigrantes. Los manifestantes dicen que han asumido los costos de los esfuerzos de Túnez para impedir que los inmigrantes lleguen a la Unión Europea, menos de un año después de que el país firmara un pacto antiinmigración con los 27 países de la UE para fortalecer la vigilancia de su frontera marítima y recibir más de mil millones de euros. en ayuda.
El presidente tunecino, Kais Saied, está adoptando una postura dura con los inmigrantes, acusándolos de traer violencia y crimen al país. La Guardia Costera de Túnez dijo que había impedido más de 21.000 intentos de migración por tierra o mar este año.
Menos de 8.000 personas lograron viajar en barco desde Túnez a Italia en los primeros cuatro meses de 2024, tres veces menos que en 2023, según la agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR). La oficina de la Organización Internacional para las Migraciones en Túnez estima que alrededor de 7.000 inmigrantes viven cerca de Jebeniana y El Amra, aunque los residentes dicen que la cifra podría ser mucho mayor..
La escena en El Amra y Jebeniana pone de relieve la difícil situación de los migrantes que buscan un futuro mejor, pero también los desafíos y tensiones que enfrenta Túnez como encrucijada migratoria. A medida que las políticas y los sentimientos hacia los migrantes continúan dividiéndose, la necesidad de soluciones humanas y duraderas se vuelve cada vez más apremiante en esta realidad compleja y emocional.
Esta aparición de los migrantes en el contexto tunecino pone de relieve las complejas cuestiones sociales y políticas de la migración, así como los desafíos que enfrentan los países del Mediterráneo. Diferentes actores, tanto nacionales como internacionales, están llamados a encontrar soluciones concertadas y duraderas para satisfacer las necesidades de los migrantes respetando al mismo tiempo los imperativos de seguridad y legalidad. Esta conmovedora y vívida historia nos recuerda la urgencia de adoptar un enfoque humano e inclusivo para afrontar las realidades de la migración y construir un futuro en el que todos puedan encontrar su lugar, su dignidad y su seguridad.