En una jornada triste y marcada por un acontecimiento dramático, una cincuentena de escolares resultaron heridos tras el derrumbe de una parte de la segunda escuela protestante de Kalangala en Goma. Esta escuela, creada desde 1994, fue escenario de una tragedia inesperada que requirió la intervención urgente de las autoridades locales y sanitarias.
Los testimonios recogidos in situ destacan el avanzado deterioro de la escuela, donde las estructuras envejecidas no podían soportar la carga de los estudiantes, provocando el colapso de parte del suelo de tablas. Esta alarmante situación despertó la emoción y la compasión del gobernador militar de Kivu del Norte, general de división Peter Cirimwami, que envió a su asesora principal, Prisca Luanda Kamala, para evaluar la situación.
Ante el crítico estado del colegio y la gravedad del incidente, las autoridades decidieron suspender inmediatamente las clases en este establecimiento e iniciar investigaciones en profundidad para establecer responsabilidades y garantizar la seguridad de los estudiantes. Prisca Luanda expresó un mensaje de compasión hacia las víctimas de este trágico acontecimiento, subrayando la necesidad de una reevaluación completa de la viabilidad de la escuela.
En el plano médico, el hospital provincial de Kivu Norte recibió a varios niños heridos, algunos de los cuales tuvieron que ser trasladados desde el hospital de La Charité. El médico Sébastien Matata indicó que el pronóstico vital de algunos niños sigue comprometido y requiere atención urgente y atenta.
Así, esta tragedia en EP 2 Kalangala reveló las evidentes deficiencias en la seguridad de la infraestructura escolar, invitando a una reflexión profunda sobre los estándares de construcción y el mantenimiento de los establecimientos educativos. Las lecciones aprendidas de este doloroso acontecimiento deben servir como catalizador para acciones concretas destinadas a garantizar un entorno escolar seguro y propicio para el desarrollo de los estudiantes.