Los habitantes del centro de Djangi, en la zona sanitaria de Drodro, en la provincia de Ituri, en la República Democrática del Congo, se beneficiaron recientemente de ayuda de emergencia de Unicef, destinada a mejorar sus condiciones de vida. De hecho, 2.135 hogares desplazados recibieron artículos de primera necesidad para el hogar (AME), incluidos utensilios de cocina, taparrabos, mantas, esteras e incluso kits de higiene íntima para mujeres en edad fértil.
Esta iniciativa, implementada por Unicef en colaboración con la ONG PPSSP, pretende responder a las necesidades urgentes de esta población vulnerable, cuyos refugios improvisados estaban deteriorados y que carecían cruelmente de recursos básicos. Los beneficiarios expresaron su agradecimiento a estas organizaciones, destacando la importancia de esta ayuda que permitió colmar algunas lagunas esenciales.
Sin embargo, a pesar de esta loable intervención, persisten los desafíos. De hecho, las necesidades en términos de seguridad alimentaria siguen siendo acuciantes y el acceso a la atención de salud también plantea un problema. Tras el fin del proyecto de asistencia sanitaria gratuita creado por el PPSSP y financiado por Unicef, muchas personas desplazadas se encuentran hoy sin poder pagar los servicios médicos esenciales.
Ante estos desafíos, es crucial que los socios de emergencia continúen apoyando a estas poblaciones desplazadas, garantizando el acceso a la atención médica y fortaleciendo la seguridad alimentaria. La construcción en curso de un centro de salud en la zona de Djangi, gracias al proyecto UNIRR financiado por Unicef, constituye un gran paso adelante para mejorar los servicios de salud disponibles para estas comunidades vulnerables.
Es esencial que las autoridades gubernamentales y los socios humanitarios trabajen juntos para garantizar la sostenibilidad de estas intervenciones y la protección de los derechos fundamentales de estas poblaciones desplazadas. La solidaridad internacional y la movilización de recursos son esenciales para garantizar un futuro más seguro y más digno para estas personas que ya han sufrido tanto.