El respeto a la imparcialidad policial es una piedra angular de cualquier proceso electoral democrático. En el centro de las preocupaciones de un grupo de activistas está la reciente cobertura mediática de las acciones del grupo de trabajo IGP, que sugiere que apuntaría a partidarios del Partido Democrático Popular (PDP). Esta situación plantea preocupaciones legítimas sobre la neutralidad de las fuerzas del orden en el estado de Edo.
Madame Adesua Odigie, coordinadora del grupo, destacó la importancia crucial de la policía para mantener la ley y el orden sin prejuicios. Pidió al IGP que garantice que la policía actúe de manera imparcial y no interfiera en el panorama político del estado de Edo. Según ella, la imparcialidad policial es “sagrada” para la integridad del proceso electoral.
En un momento en el que la confianza en las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley es esencial, el grupo insta a los residentes del estado de Edo a no dejarse intimidar por los acontecimientos recientes. Animan a todos los residentes a ejercer sus derechos democráticos saliendo a votar el día de las elecciones por los candidatos elegidos. La participación de cada ciudadano es esencial para garantizar la integridad de nuestro proceso electoral y defender su voto.
Reafirmando su compromiso con unas elecciones transparentes y justas, los miembros del grupo piden a todas las partes interesadas que garanticen un entorno pacífico. El respeto a la imparcialidad de las fuerzas del orden es un elemento clave para garantizar elecciones libres y justas, subraya el grupo, que destaca la necesidad de una plena participación ciudadana para consolidar la democracia.
En última instancia, proteger la integridad del proceso electoral y respetar la imparcialidad de las fuerzas del orden son garantes esenciales de la democracia. Es esencial que las autoridades competentes garanticen que cada elector pueda ejercer su derecho al voto con total libertad y seguridad, para garantizar elecciones democráticas y transparentes en el futuro.