Fatshimetrie, 9 de agosto de 2024 – El fin del mandato de la MONUSCO en la República Democrática del Congo está provocando reacciones y preocupaciones entre las organizaciones de derechos humanos. Sin embargo, está surgiendo un rayo de esperanza con la creación de una oficina residual que seguirá trabajando para proteger los derechos fundamentales de la población congoleña.
Durante una reunión de la Sinergia de Organizaciones de Derechos Humanos (SODH) en Bukavu, Jerry Ntondo, analista de derechos humanos de la Oficina Conjunta de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, quiso tranquilizar a los participantes sobre la continuidad de las acciones llevadas a cabo. Destacó la persistencia de la oficina residual de la MONUSCO que permitirá a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos continuar su trabajo de acuerdo con su mandato inicial.
A pesar de la salida de la MONUSCO, Murhabazi Namegabe, secretario permanente del SODH, expresó su gratitud por el papel crucial desempeñado por la misión de la ONU en la formación de los defensores de los derechos humanos en la República Democrática del Congo y, más particularmente, en Kivu del Sur. Subrayó la importancia de esta colaboración y lamentó la partida de este socio.
La labor realizada por la MONUSCO, particularmente a través de su Oficina Conjunta de Derechos Humanos, ha sido un pilar esencial en la promoción y defensa de los derechos humanos en el país. Los defensores de los derechos humanos capacitados por la misión de la ONU pudieron promover la causa de los derechos fundamentales y luchar contra los abusos y violaciones.
A pesar de esta desviación, es esencial que la oficina residual de la MONUSCO y las organizaciones locales de derechos humanos continúen cooperando y trabajando juntas para garantizar la protección de los derechos de todos los ciudadanos congoleños. La transición hacia este nuevo capítulo debe gestionarse de manera transparente y efectiva para preservar los logros y fortalecer las acciones a favor de los derechos humanos.
En un contexto donde persisten los desafíos y las violaciones de derechos humanos en la República Democrática del Congo, es esencial que la comunidad internacional y los actores locales continúen trabajando de la mano para garantizar la protección y el respeto de los derechos fundamentales de todos. La oficina residual de la MONUSCO desempeñará un papel clave en este proceso de transición y consolidación de los logros en materia de derechos humanos.