Fatshimetrie, 15 de agosto de 2024 – La artesanía como salida a la ociosidad y al bandidaje urbano fue destacada recientemente durante un taller de adaptación organizado en Limete, al este de Kinshasa, en la República Democrática del Congo. Daniel Kano Pasula, preparador físico, lanzó un llamamiento a los jóvenes de la localidad para animarlos a dedicarse a profesiones artesanales para ganar autonomía.
Según Pasula, aprender oficios manuales puede ofrecer una alternativa constructiva a la tentación del bandidaje y la ociosidad. Compartió su experiencia personal, destacando que desde el año 2002 se desempeña como ajustador lo que ha demostrado ser una fuente estable de ingresos. Gracias a su profesión, pudo mantener a su familia, educar a sus hijos y garantizar su propia independencia financiera.
En su taller, Pasula formó gratuitamente a un equipo de jóvenes, de los cuales el 60% ya ha logrado insertarse en el mercado laboral, algunos trabajando para empresas de la capital y otros abriendo sus propios talleres. Destacó que aprender a encajar es una actividad de alto riesgo que requiere precaución y determinación, y recomienda que los jóvenes interesados sean acompañados por un directivo durante su formación.
Esta iniciativa resalta la importancia de promover el comercio artesanal como solución a los problemas sociales que enfrentan muchas comunidades. Ofreciendo a los jóvenes oportunidades de formación en sectores como la artesanía, podemos ayudar a fortalecer su autonomía, su confianza en sí mismos y mantenerlos alejados de actividades delictivas.
Por lo tanto, es fundamental apoyar y promover estas iniciativas encaminadas a fomentar el aprendizaje de los oficios artesanales, no sólo para el bienestar de las personas y las comunidades, sino también para promover el desarrollo económico y social a largo plazo. Al invertir en la formación de jóvenes en oficios manuales, estamos construyendo un futuro más prometedor y resiliente para todos.
Esta conciencia colectiva puede ser el punto de partida para una transformación positiva dentro de la sociedad, donde las profesiones artesanales sean reconocidas como vectores de crecimiento, autonomía y desarrollo para la juventud congoleña. Aprovechando la riqueza y diversidad del conocimiento local, promovemos la creación de oportunidades sostenibles y la construcción de una comunidad sólida y próspera.
Esta invitación a aprender oficios artesanales es una invitación a la esperanza, la dignidad y la resiliencia, ofreciendo a los jóvenes la oportunidad de realizarse plenamente y contribuir positivamente a la sociedad que los rodea. Valorando y fomentando estos talentos y habilidades construimos un futuro mejor para todos.