La trágica situación que persiste desde hace casi cuatro meses en la ciudad minera de Rubaya, en la región de Masisi, donde se ha establecido el grupo terrorista M23, está provocando una creciente preocupación entre los residentes y las autoridades locales. Notables de la región hacen sonar la alarma y piden insistentemente a las autoridades congoleñas que intervengan decisivamente para poner fin a esta ocupación que está sembrando caos y desolación.
Hakizimana François, uno de los portavoces de los notables de la región, expresa con fuerza el malestar de los habitantes de Rubaya ante esta ocupación ilegal. Desde la invasión de los terroristas del M23 el 30 de abril, la vida cotidiana de los residentes se ha visto perturbada, su seguridad comprometida y sus recursos saqueados ilícitamente, sin tener en cuenta las leyes y los derechos de las poblaciones locales.
La situación es tanto más alarmante cuanto que el M23 explota abusivamente los recursos mineros de la región, en particular el coltán y la turmalina, que luego son transportados fuera de las fronteras congoleñas, en particular hacia Ruanda. Esta explotación incontrolada no sólo priva a los excavadores artesanales de sus medios de subsistencia, sino que también compromete la soberanía y la economía nacional de la República Democrática del Congo.
Notables insisten en la urgencia de restablecer la paz y la seguridad en las zonas ocupadas por el M23. Destacan que sólo una acción concertada y firme por parte de las autoridades congoleñas permitirá a las poblaciones locales recuperar una apariencia de normalidad, reconstruir sus vidas y reinvertir territorios abandonados ante la amenaza terrorista.
La comunidad internacional también está preocupada por esta situación crítica que azota la región de Masisi. Es fundamental que se adopten medidas inmediatas y eficaces para poner fin a esta ocupación ilegal y restablecer el orden y la justicia en la región, en interés de los habitantes de Rubaya y de todo el territorio congoleño.
En conclusión, la situación en la ciudad minera de Rubaya refleja los desafíos económicos y de seguridad que enfrenta la República Democrática del Congo. Es urgente poner fin a esta ocupación y restaurar la paz y la soberanía en el país, permitir que las poblaciones locales vivan con dignidad y seguridad y reconstruir un futuro mejor para las generaciones futuras.