**Una epidemia de viruela simica está arrasando las provincias de Kwango e Ituri en la República Democrática del Congo: un llamado a la vigilancia y la solidaridad**
Desde enero, las provincias de Kwango e Ituri en la República Democrática del Congo se enfrentan a una grave epidemia de viruela simica. Las autoridades sanitarias locales han registrado al menos 32 casos de esta enfermedad viral, que lamentablemente provocó la muerte de una persona. Estas preocupantes cifras ponen de relieve la urgencia de una acción coordinada para detener la propagación de este virus.
Según el coordinador del Programa Ampliado de Inmunización de Kwango, Léon Makambu, la situación es particularmente preocupante en seis zonas sanitarias de la provincia, siendo la zona de Kenge la más afectada, con 13 casos confirmados. La enfermedad también se ha extendido a las zonas de Kitenda, Muralembo, Kasongo-Lunda, Mpanzi y Boko, lo que pone de relieve la magnitud de la crisis sanitaria que afronta la región.
Las autoridades sanitarias locales, aunque movilizadas para atender a los pacientes y seguir la evolución de la enfermedad, piden un importante apoyo financiero y logístico para reforzar sus capacidades de respuesta. La rápida identificación de casos y la implementación de medidas preventivas son esenciales para contener la propagación de la viruela del simio dentro de la comunidad.
Al mismo tiempo, la provincia de Ituri no se libra de esta epidemia, con seis casos sospechosos notificados en diferentes zonas sanitarias, entre ellas Bunia, Mambasa-Centre, Niania y Tchomia. El médico jefe de la División Provincial de Salud de Ituri, el doctor Michel Lola Loway, asegura que todos los casos sospechosos están siendo tratados clínicamente, a la espera de los resultados de las pruebas realizadas por el laboratorio del Instituto Nacional de Investigaciones Biomédicas de Kinshasa.
Ante esta alarmante situación, es imperativo concienciar a la población para que adopte estrictas medidas de higiene, evitar todo contacto con personas y animales potencialmente infectados y promover la vacunación como medio esencial de prevención. La colaboración entre las autoridades sanitarias, los profesionales sanitarios y las comunidades locales es crucial para contener la propagación de este virus y proteger a la población contra los riesgos para la salud.
En conclusión, el brote de viruela simica en las provincias de Kwango e Ituri en la República Democrática del Congo es una alerta grave que requiere una respuesta urgente y coordinada. La vigilancia, la solidaridad y el compromiso de todos son fundamentales para afrontar esta crisis sanitaria y prevenir nuevos contagios. La salud y el bienestar de la población deben seguir siendo la prioridad absoluta, y la unidad de acción es esencial para superar juntos esta terrible experiencia.