*Fatshimetrie* fue testigo del inicio del año escolar en la República Democrática del Congo en septiembre de 2024. Un día simbólico que marca el inicio de un nuevo año escolar, nuevos desafíos y esperanzas para miles de estudiantes en todo el país.
Este regreso a clases estuvo marcado por cierta diversidad de situaciones dependiendo de las distintas regiones del país. Si en algunas escuelas, como la escuela secundaria Lamba Ntumua en Kongo Central, el inicio del año escolar se desarrolló en un ambiente de celebración y alegría, en otros lugares, nubes oscuras se cernían sobre las cabezas de los escolares.
En Kinshasa, la capital, el inicio del año escolar fue desigual. Si bien algunas escuelas registraron una gran presencia de estudiantes, otras, tras una convocatoria de huelga lanzada por los sindicatos de docentes, quedaron desiertas. Un fenómeno similar se ha producido en otras ciudades importantes del país, como Matadi y Mbujimayi, donde la rutina educativa ha retomado su curso, a pesar de algunas perturbaciones.
Sin embargo, en algunas zonas más remotas el panorama era mucho menos halagüeño. En Mongwalu y en el centro Mambassa de Ituri, el inicio del curso escolar fue discreto, mientras que en el centro Lubero los estudiantes tuvieron que regresar por la falta de aulas disponibles debido a la presencia de desplazados.
En Goma, el inicio del año escolar estuvo marcado por la ausencia casi generalizada de estudiantes en las escuelas públicas y privadas. Pocos docentes se presentaron, respondiendo a la convocatoria de huelga lanzada por el sindicato de docentes congoleños, SYECO. Una situación que pone de relieve los persistentes desafíos que enfrenta el sistema educativo del país.
A través de esta diversidad de situaciones observadas durante el regreso a la escuela en la República Democrática del Congo, una cosa es segura: la educación sigue siendo un tema importante para el país. A pesar de los desafíos y obstáculos, el deseo de formar a las generaciones más jóvenes permanece intacto, simbolizando la esperanza de un futuro mejor para todos. Un regreso a la escuela que, más allá de las diferencias, subraya la importancia y la necesidad de la educación para la construcción de una sociedad fuerte y próspera.