La Universidad de Port Harcourt (UNIPORT) salió recientemente de las sombras tras acusaciones de violencia entre estudiantes que supuestamente provocaron la muerte de algunos de ellos. Sin embargo, la dirección de la universidad negó categóricamente estos informes, indicando que se trataba sólo de un altercado entre estudiantes y no de un enfrentamiento entre bandas rivales.
En una declaración oficial, el portavoz de la universidad, Dr. Sam Kpenu, aclaró la situación diciendo que ningún estudiante murió ni resultó herido en el incidente en cuestión. Destacó que se trataba simplemente de una pelea y no de un enfrentamiento entre miembros de fraternidades estudiantiles. La capacidad de respuesta de la dirección de la universidad, de la unidad de seguridad interna y de la policía permitió intervenir rápidamente para poner fin a la situación.
El Dr. Kpenu expresó su preocupación por cómo algunos medios de comunicación tergiversaron este incidente. Subrayó el compromiso de la universidad de mantener altos estándares de seguridad en el campus, condenando enérgicamente cualquier forma de cultismo, acoso o comportamiento violento.
Es fundamental aclarar cualquier confusión en torno a este incidente y resaltar que la universidad está garantizando la seguridad de sus estudiantes y personal. Sin embargo, es aún más importante enfatizar la importancia de un ambiente universitario seguro que sea propicio para el aprendizaje y el desarrollo personal. Es crucial que todos contribuyan a promover una cultura de paz, respeto y tolerancia dentro de la comunidad estudiantil.
En última instancia, la Universidad de Port Harcourt sigue siendo un lugar de excelencia académica donde pueden florecer el conocimiento y la creatividad. La gestión proactiva de la seguridad y el respeto a los valores éticos y morales promueven un ambiente positivo para la educación y el crecimiento intelectual. Esperemos que este incidente sirva como lección y refuerce el compromiso de todos de mantener un campus seguro y acogedor para todos sus miembros.