«Diana tiene el récord mundial de uñas más largas, que son más largas que un autobús escolar amarillo estándar. Ha dedicado más de 25 años a cultivar sus impresionantes uñas. La poseedora del récord anterior, Ayanna Williams, finalmente decidió cortárselas, dejando a Diana con el título de mujer con las uñas más largas del mundo en un solo par de manos, un récord que batió en 2008 y que anteriormente ostentaba Lee Redmond.
¿Cómo es que no se ha cortado las uñas en 27 años? Esta decisión surgió de una tragedia desgarradora que devastó a su familia. En 1997, Diana decidió no volver a cortarse las uñas nunca más. Ese día, mientras estaba de compras, ocurrió el hecho que cambió su vida. Su hija menor la llamó presa del pánico para decirle que su hija Latisha, de 16 años, había muerto de un ataque de asma.
Latisha tenía un vínculo especial con Diana, ella era quien cuidaba sus uñas todos los fines de semana. Los limaba y pulía, y esos momentos eran preciosos para Diana. Después de la muerte de Latisha, Diana se negó a permitir que nadie le cortara las uñas. Dejarlos crecer se convirtió para ella en una forma de honrar la memoria de su hija.
Su dolor la sumió en una profunda depresión. Cuando su familia le preguntó sobre su negativa a cortarse las uñas, ella les explicó que era su manera de mantenerse conectada con la memoria de Latisha. Diana tiene dificultades para realizar tareas manuales con las manos y, a menudo, usa los pies para abrir el refrigerador o recoger ropa. Sus largas uñas a veces incluso sobrepasaban la ventanilla del coche, lo que la obligaba a dejar de conducir. Tiene dificultad para levantar cosas del suelo y evita las cremalleras porque le dañan las uñas. Sus manos se han vuelto menos funcionales debido a la longitud de sus uñas».
Esta conmovedora historia destaca cómo Diana transformó su dolor en un inesperado e inquietante homenaje a su amada hija. Su negativa a cortarse las uñas se convirtió en algo más que un simple acto físico: se convirtió en un símbolo de su amor eterno por Latisha. Este gesto extraordinario muestra cómo el duelo puede adoptar formas únicas y sorprendentes, y cómo cada uno encuentra su propia manera de superar las tragedias de la vida.