El equipo del Arsenal se vio sacudido recientemente por una mala noticia: su capitán, Martin Odegaard, sufrió una lesión en el tobillo durante un partido con la selección de Noruega durante el último parón internacional. Las primeras estimaciones sugirieron un rápido regreso a la acción, pero una investigación más profunda reveló que el jugador de 25 años estaría fuera de acción hasta diciembre y posiblemente más allá.
Esta lesión aísla al Arsenal, que se encuentra sin una solución sustitutiva para su centrocampista, sobre todo porque Mikel Merino, fichaje de verano, también se encuentra en fase de recuperación tras una lesión. La situación es tanto más compleja cuanto que el joven Declan Rice, sancionado, no podrá jugar el partido contra el Manchester City, vigente campeón de la Premier League.
El entrenador del Arsenal, Mikel Arteta, expresó su decepción por la gravedad de la lesión de Odegaard en una rueda de prensa previa al partido de la Liga de Campeones contra el Atalanta: «Los exámenes recientes han revelado daños importantes, especialmente en uno de los ligamentos del tobillo. Es una lesión bastante importante y no «Tendremos que estar sin él por un tiempo, con suerte no por meses, pero tendremos que esperar para saber más».
Esta noticia supone un duro golpe para los gunners, que tendrán que buscar soluciones internas para compensar la ausencia de su emblemático capitán. Este período sin Odegaard será una prueba de carácter para el equipo y el cuerpo técnico del Arsenal, pero también una oportunidad para que otros jugadores se revelen y asuman responsabilidades en el campo.
Así, el camino de vuelta a la plena competitividad de Martin Odegaard promete ser largo y plagado de obstáculos, pero no hay duda de que su determinación y su deseo de volver más fuerte serán activos valiosos en su recuperación. Mientras tanto, el Arsenal tendrá que encontrar soluciones temporales para arreglárselas sin él y seguir compitiendo al más alto nivel del fútbol inglés y europeo.