Modeste Bahati Lukwebo es una figura política imprescindible en la República Democrática del Congo. Recientemente, durante una entrevista con el canal de televisión TV5 Monde, el ex presidente del Senado expresó con pesar su frustración por lo que califica de marginación de su partido político, la AFDC-A (Alianza de Fuerzas Democráticas del Congo y aliados), en la gobernancia del país.
En un discurso marcado por la desilusión, Modeste Bahati subrayó el hecho de que algunas personas, que no han contribuido significativamente durante las elecciones, todavía disfrutan de privilegios dentro del aparato estatal. Esta situación afectó profundamente al dirigente político, quien mencionó que el arduo trabajo de su partido no había sido recompensado adecuadamente.
Está claro que la frustración de Modeste Bahati surge de un sentimiento de injusticia e impotencia frente a un sistema donde los méritos a veces parecen dejarse de lado en favor de cálculos políticos más opacos. Sin embargo, a pesar de sus decepciones, afirmó su apoyo inquebrantable al Jefe de Estado, Félix Tshisekedi, subrayando así su compromiso con la Sagrada Unión.
El llamamiento a un arbitraje lanzado por Modeste Bahati a la autoridad moral de la Unión Sagrada, Félix Tshisekedi, demuestra su deseo de encontrar soluciones en el seno de la coalición gobernante. Este enfoque subraya la importancia del diálogo y la consulta para resolver las tensiones políticas y fortalecer la cohesión dentro del gobierno.
En última instancia, la entrevista de Modeste Bahati Lukwebo destaca las complejidades del panorama político congoleño, donde las rivalidades internas y las rivalidades a veces pueden comprometer los ideales de democracia y justicia. Esperemos que los actores políticos puedan superar sus diferencias para trabajar juntos y construir un futuro mejor para la República Democrática del Congo.