Fatshimetría, 23 de septiembre de 2024
En un importante gesto humanitario, el Ministro de Estado encargado de Justicia supervisó la liberación de 1.685 detenidos, en su mayoría enfermos, de la prisión central de Makala, en Kinshasa. Esta acción forma parte de una política destinada a mejorar las condiciones de detención y ofrecer una segunda oportunidad a las personas necesitadas.
La liberación de estos prisioneros se produjo de manera organizada y digna, lo que refleja el compromiso de las autoridades de garantizar el respeto a los derechos humanos y la atención médica a los detenidos. Los servicios del Ministerio de Justicia, en colaboración con el centro penitenciario de Makala, coordinaron esta operación de liberación que se prolongó hasta altas horas de la noche.
El ministro Constant Mutamba, en un gesto marcado por la humanidad, informó a los detenidos que esta liberación era una prioridad del gobierno, con el objetivo de socorrer a las personas más vulnerables y promover su reintegración a la sociedad. Los autobuses fletados por el Ministerio de Justicia y Transco permitieron trasladar a los detenidos liberados a centros de atención y a sus respectivos hogares, garantizando así su atención inmediata.
Al mismo tiempo, se tomaron medidas de emergencia para garantizar el seguimiento médico de los casos más críticos, lo que demuestra el compromiso de las autoridades de garantizar la salud y el bienestar de los ex detenidos. Las instrucciones dadas al director interino de acelerar el tratamiento de los pacientes, desinfectar los locales y garantizar un suministro constante de medicamentos demuestran la voluntad de garantizar condiciones de detención dignas y seguras.
La operación de libertad condicional que tuvo lugar a lo largo del día se llevó a cabo con eficiencia y humanidad, subrayando la necesidad de continuar los esfuerzos para reducir la congestión carcelaria y garantizar el respeto de los derechos fundamentales de los presos. Esta acción demuestra una clara voluntad política de promover la justicia, la dignidad humana y la compasión hacia los más desfavorecidos.
Fatshimetrie acoge con satisfacción esta loable iniciativa y pide la continuación de este tipo de acciones humanitarias para construir una sociedad más justa, inclusiva y unida.
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