El evento excepcional, que celebró el dinamismo y el mérito de los funcionarios estatales, demostró el compromiso inquebrantable con el deber y el servicio público. El Estado, establecido el 23 de septiembre de 1987 por el general retirado Ibrahim Babangida, honró a personas destacadas en esta trascendental ceremonia.
Entre los premiados se encontraban nombres como Lawal Halilu del Ministerio de Educación Básica y Secundaria, Abubakar Lawal de la Dirección General de Auditoría del Estado, Bishir Aliyu, mensajero de la oficina del SSG, y Farida Nuraddeen, maestra de escuela primaria en Bakori. Estos hombres y mujeres ejemplares fueron recompensados por su dedicación y excelencia profesional.
A algunos ganadores se les entregaron autos, mientras que otros recibieron obsequios en efectivo en reconocimiento a su arduo trabajo y dedicación. También entre los que recibieron automóviles se encontraban funcionarios como Nura Idris de la Oficina del Jefe de la Función Pública, Nura Isiyaku de la Comisión de Servicios Docentes, Mansur Suleiman de KTARDA y el Dr. Shemau Kabir de SPHCDA.
Entre los ganadores, que recibieron la suma de 2 millones de libras esterlinas cada uno, se encontraban personas talentosas como Abdullahi Yusuf, Abdullahi Muhammad, Muawiyya Musa, Isuhu Ahmed y Sada Rabe. Estos premios demuestran el compromiso del estado con la excelencia y el apoyo a quienes se dedican a su misión con determinación y propósito.
El gobernador, en su emotivo discurso, expresó su gratitud a Alá por darle la oportunidad de servir a su comunidad como gobernador electo. Prometió continuar desempeñando sus funciones con honestidad y dedicación por el bienestar de todos los ciudadanos del estado.
Destacó la importancia de la planificación a largo plazo con énfasis en la sostenibilidad y el desarrollo a largo plazo. Al pedir el apoyo continuo de la población, el gobernador afirmó su determinación de brindar más beneficios positivos a la población en los próximos años.
En definitiva, esta ceremonia simboliza no sólo el reconocimiento al arduo trabajo y la dedicación, sino también el compromiso con un futuro próspero y sostenible para todos los ciudadanos del estado. La excelencia siempre debe celebrarse y fomentarse, porque conduce a una sociedad más equitativa y a un futuro mejor para todos.