La educación, pilar fundamental de cualquier sociedad, está en el centro de las preocupaciones de los habitantes de Bafwasende y sus alrededores, en la provincia de Tshopo. Tres semanas después del inicio oficial del año escolar, las escuelas de la región permanecen paralizadas a la espera de que se levante la huelga de docentes para poder iniciar las clases. La situación, aunque compleja, pone de relieve las numerosas dificultades que afrontan las escuelas en este ámbito.
En la escuela primaria de Bafwapada, a pocos kilómetros de Kisangani, el director de la escuela, el Sr. Justin Niniya, expresa su consternación por la falta de comunicación de los sindicatos con sede en Kisangani: «No podemos reanudar sin tener una nota de la provincia. Pero yo «Vengo de Kisangani y vi con mis propios ojos que los estudiantes de las escuelas públicas no estudian.» Esta conmovedora observación pone de relieve la falta de coordinación y transparencia dentro del sistema educativo.
Además de la huelga de docentes, surge otro gran desafío: la reconstrucción de un edificio escolar que se derrumbó sobre los techos de las aulas. Ante esta situación crítica, el comité de padres se moviliza para sensibilizar a las familias que dudan en matricular a sus hijos en la escuela. Jules Makasi, miembro del comité, declara con determinación: “Tenemos la intención de inscribir a nuestros hijos, reconstruir nuestro edificio y pedimos al Estado que nos ayude”.
La precaria situación de las escuelas de la región de Bafwasende no es un caso aislado. Muchas otras escuelas se encuentran en una situación similar, poniendo en riesgo la educación de los jóvenes estudiantes. Sin embargo, se están tomando medidas para remediar estas dificultades. Se establecerán contactos, en particular, con las autoridades de Kisangani para obtener aclaraciones sobre el posible levantamiento de la huelga de los docentes.
En conclusión, la preocupante situación de las escuelas en Bafwasende y sus alrededores pone de relieve la urgencia de una acción concertada para garantizar el acceso a una educación de calidad para todos los niños de la región. Es imperativo que las autoridades locales y nacionales tomen medidas adecuadas para superar estos obstáculos y garantizar un futuro mejor para los jóvenes de Tshopo.