Mientras las noticias candentes dominan la agenda nacional, un grupo de ex agitadores de la región del delta del Níger, actualmente inscritos en el Programa de Amnistía Presidencial, han manifestado su apoyo a la administración dirigida por el presidente Bola Ahmed Tinubu. En un paso significativo, expresaron públicamente su desacuerdo con la protesta nacional prevista contra el hambre y las penurias, prevista para el 1 de octubre. La declaración, realizada en un seminario en Warri, estado de Delta, fue firmada por los generales Andrew Joel Azazi y Emma Satu, representantes de la Tercera Fase del Programa Presidencial de Amnistía.
Su posición se basa en la confianza en el liderazgo y las capacidades de la administración vigente para restaurar la economía del país. Al afirmar que el presidente Tinubu tiene buenas intenciones para Nigeria a pesar de los desafíos económicos actuales, el grupo cree que darle el tiempo y el apoyo necesarios es esencial para superar las dificultades actuales.
Este gesto de apoyo se traduce en la convicción de que más de 5.000 antiguos agitadores del delta del Níger se están alejando de la manifestación anunciada. En su declaración, acogieron con satisfacción los recientes nombramientos en puestos clave, como el del Dr. Dennis Otuaro como Administrador del Programa de Amnistía Presidencial y el del Jefe Samuel Ogbuku como Director General de la Comisión de Desarrollo del Delta del Níger.
Su posición se ve reforzada por el Alto Jefe Yusuf Eregbene, ex presidente del Consejo de Peregrinaciones del Estado del Delta y Obaseki del Reino Akugbene-Mein, quien apoya firmemente los esfuerzos de la administración Tinubu para abordar los desafíos económicos del país. Se refiere en particular a la creación de miles de puestos de trabajo para jóvenes en el delta del Níger a través de la empresa Tantita Security Services Nigeria Ltd, destacando así los impactos positivos de estas iniciativas en la región.
Este posicionamiento a favor de la actual administración revela un deseo de confianza y colaboración para enfrentar los desafíos nacionales y promover el desarrollo sostenible. También ilustra el reconocimiento de las acciones emprendidas para promover la estabilidad y la prosperidad económica en el país. Este fuerte apoyo de los ex agitadores demuestra una visión colectiva y un compromiso con un futuro mejor para Nigeria y sus ciudadanos.