El mundo del teatro congoleño es honrado y celebrado a través del inolvidable espectáculo “Wazalendo”, que rindió brillantemente homenaje al fallecido dramaturgo Norbert Mikanza Mobyem, treinta años después de su partida. Este memorable evento artístico tuvo lugar en el Instituto Nacional de las Artes de Kinshasa, reuniendo a entusiastas del teatro, artistas y estudiantes en un momento de intercambio y conmemoración de esta figura emblemática.
Iniciado por el talentoso coreógrafo y director congoleño Jackson Lohanga Kamba, el espectáculo “Wazalendo” respiró nostalgia y emoción al evocar el legado dejado por Mikanza Mobyem en el ámbito del teatro en la República Democrática del Congo. Considerado el precursor del teatro y el ballet nacional en el país, Mobyem marcó profundamente la historia cultural del Congo a través de su dedicación y contribución al desarrollo de este arte.
La obra «Wazalendo» supo cautivar y sensibilizar a los espectadores abordando temas importantes como la solidaridad entre los pueblos congoleño y ruandés, así como las tragedias vividas en la región oriental del país. A través de canciones, pasos de baile y conmovedoras representaciones teatrales, los diecisiete artistas rindieron un vibrante homenaje a Mikanza Mobyem, destacando la importancia de la cultura y el arte en la construcción de una sociedad unida fuerte y saludable.
Paralelamente al espectáculo, se presentó una exposición de obras artísticas dedicadas a la memoria de Mikanza Mobyem, destacando el legado y la influencia de este visionario del teatro congoleño. A través de fotografías, collages y dibujos, los artistas rindieron un vibrante homenaje al hombre que supo encarnar la resistencia y la inteligencia ante los desafíos de su tiempo.
En este trigésimo aniversario de su muerte, Norbert Mikanza Mobyem sigue siendo una figura imprescindible del teatro congoleño, cuya huella artística sigue inspirando a las generaciones futuras. Su compromiso con la promoción de la cultura y el arte, así como su contribución a la evolución del teatro en la República Democrática del Congo, siguen siendo fuentes de inspiración y orgullo para todo el pueblo congoleño. Este homenaje a Mobyem es mucho más que una simple conmemoración: es un testimonio vivo de la riqueza y diversidad de la escena teatral congoleña, anclada en su historia y mirando hacia el futuro.