“Jugadores de las Súper Águilas atrapados en el aeropuerto de Libia: el asunto Fatshimetrie”
Los recientes percances de jugadores de la selección nigeriana, las Super Eagles, en el aeropuerto de Libia han provocado indignación y enojo en todo el mundo. Mientras se dirigían a un partido de clasificación para la Copa Africana de Naciones, las autoridades libias detuvieron a los jugadores durante más de 15 horas, privándolos de comida, bebida y comunicación. Su avión fletado fue secuestrado en pleno vuelo y se les impidió salir del aeropuerto, sumidos en una situación caótica y alarmante.
Este trato inhumano hacia los jugadores nigerianos provocó una respuesta inmediata de las autoridades federales, que convocaron al encargado de negocios de Libia a Nigeria, mientras que el presidente Bola Tinubu pidió justicia rápida. El partido entre las Súper Águilas y Libia ha sido cancelado y la Confederación Africana de Fútbol examinará posibles violaciones de sus normas en la materia.
Los jugadores, incluidas estrellas que juegan en clubes de renombre de todo el mundo, expresaron su enfado y disgusto en las redes sociales, denunciando el trato inaceptable que sufrieron. Compartieron vídeos y comentarios que revelaban las condiciones precarias en las que estaban retenidos en el aeropuerto de Libia, comparables a las de una situación de rehenes.
Algunos jugadores, como testimonio de su terrible experiencia, expresaron su frustración y consternación ante esta situación inaceptable. Wilfred dijo: “No es fútbol. Muy vergonzoso. Prisioneros como selección nacional. Vergonzoso.» Victor Boniface, del Bayer Leverkusen, añadió: «En el aeropuerto durante casi 13 horas, sin comida, sin wifi, sin lugar para dormir. En África podemos hacerlo mejor». Moses Simon, del Nantes, ha denunciado las espantosas condiciones a las que se enfrentaron las Súper Águilas en Libia, describiendo la experiencia como una situación de rehenes.
El capitán William Troost-Ekong también compartió los inquietantes detalles de este episodio en las redes sociales, denunciando el comportamiento vergonzoso de las autoridades libias. Después de más de 15 horas de espera, el equipo se negó a participar en el partido en señal de protesta.
Finalmente, el Ministro de Asuntos Exteriores de Nigeria, Yusuf Tuggar, intervino para ayudar a resolver los problemas que enfrentan los jugadores. Su respuesta rápida y eficaz fue elogiada mientras trabajaba para garantizar que las Super Eagles tuvieran condiciones dignas y un regreso seguro.
El incidente en el aeropuerto de Libia ha puesto de relieve los desafíos que enfrentan los equipos nacionales cuando viajan a África, subrayando la importancia de garantizar estándares y protocolos adecuados para el bienestar de los atletas.. En el futuro, es fundamental que este tipo de situaciones no vuelvan a surgir para preservar la integridad y el respeto del deporte internacional.