Las recientes noticias sobre el ex Ministro de Finanzas Tito Mboweni han sacudido al país y han provocado una ola de homenajes y testimonios tras su muerte tras una breve enfermedad a la edad de 65 años. Mboweni será recordado para siempre en la historia de la Sudáfrica post-apartheid gracias a su impacto en la política monetaria, las leyes laborales y las finanzas públicas.
Más allá de sus inesperados momentos de notoriedad en la cultura popular gracias a sus escapadas nocturnas cocinando pescado enlatado y el homenaje que se le rinde con canciones de hip-hop, Mboweni será mejor recordado por su influencia en la economía sudafricana. Conocido por su compromiso inquebrantable con los derechos de los trabajadores, ha sido un firme defensor de la implementación de legislación clave en esta dirección. Modernizó el marco de política monetaria del país y guió a Sudáfrica a través de la pandemia de Covid-19 tomando medidas estrictas para ajustar las finanzas públicas.
Su carrera como activista estudiantil exiliado en Lesotho es testimonio de su temprano compromiso con la causa. Bonang Mohale, ex presidente de Business Unity South Africa, señaló que las contribuciones políticas y económicas de Mboweni marcaron sus casi 30 años en el servicio público. Mboweni estuvo detrás de muchas reformas económicas importantes y dio forma a los marcos y políticas económicas que aún están vigentes en la actualidad.
Después de ser nombrado Ministro de Trabajo tras las elecciones de 1994, Mboweni trabajó para mejorar la legislación del país post-apartheid, incluyendo la implementación de leyes clave como la Ley de Condiciones Básicas de Trabajo, las relaciones laborales, la Ley de Seguridad y Salud en las Minas y la Ley Económica Nacional. Ley de Desarrollo y el Consejo del Trabajo.
Adrian Saville, profesor de economía en el Instituto Gordon de Ciencias Empresariales, destaca la importancia de las políticas laborales de Mboweni, a pesar de los desafíos actuales de Sudáfrica en términos de desempleo, desigualdad salarial y exclusión económica.
Como octavo gobernador del Banco de la Reserva de Sudáfrica desde 1999, Mboweni lideró importantes reformas para aumentar la transparencia en la toma de decisiones de política monetaria. Su introducción de objetivos de inflación permitió al banco mantener la estabilidad de precios, con un objetivo de inflación fijado entre el 3% y el 6%.
Su nombramiento como ministro de Finanzas en 2018 marcó su regreso a la política activa, donde abogó por congelar los salarios de los funcionarios públicos durante tres años a partir de 2020 para controlar el gasto público y la deuda.
A pesar de sus notables logros, persisten desafíos, incluida la necesidad de reformar el sector público para optimizar el uso de los fondos asignados.. Sin embargo, el legado de Tito Mboweni sigue siendo innegable y su impacto en Sudáfrica quedará grabado en la historia de la nación.