En el centro de las últimas noticias ha surgido una polémica entre el famoso abogado de derechos humanos Femi Falana y su hijo, el músico y activista Folarin Falana, comúnmente conocido como Falz, por un lado, y el popular travesti Idris Okuneye, alias Bobrisky, por el otro.
Las tensiones estallaron tras las acusaciones difamatorias hechas por Bobrisky contra los Falana. Estas afirmaciones fueron ampliamente difundidas a través de grabaciones de audio que circularon en línea.
En una de estas grabaciones, compartida por el controvertido Martin Otse, también conocido como VeryDarkMan, Bobrisky afirma haber tenido una discusión con Falz para pedirle ayuda para convencer a su padre (Falana) de obtener un perdón presidencial por la suma de 10 millones de naira. También afirma haberle pedido a Falz 3 millones de naira para recibir un trato preferencial en el Centro Correccional de Kirikiri.
Otra grabación de audio revela que Bobrisky supuestamente pagó una suma de 5 millones de naira a un abogado nigeriano para obtener el perdón del gobierno federal por los cargos presentados en su contra por la Comisión de Delitos Económicos y Financieros (EFCC).
Sin embargo, una carta fechada el 14 de octubre de 2024 de los representantes legales de Falana, Olorunfemi Akinyemi y Taiwo E. Olawanle, respondió enérgicamente a las acusaciones, denunciando acusaciones infundadas y difamatorias formuladas contra Falana.
En esta misiva se afirma claramente que estas acusaciones son escandalosas y dañan la reputación de Falana. Por ello, los abogados exigen una disculpa pública inmediata y una retractación total, que se difundirán en todos los medios donde se difundieron los comentarios difamatorios.
Es necesario subrayar que las acusaciones formuladas por Bobrisky son infundadas y tienden a extorsionar al público, empañando al mismo tiempo la reputación profesional de Falana.
De hecho, tal conversación nunca ha tenido lugar y las acusaciones de Bobrisky tienen como único objetivo extorsionar y manchar la reputación de los Falana.
Esta carta, un verdadero acto de defensa de la integridad y reputación de Falana, concluye con una conclusión firme sobre la necesidad de que Bobrisky presente una disculpa formal en interés de todos.
Por lo tanto, este caso plantea cuestiones complejas en torno a la difamación en línea, el impacto de las acusaciones falsas en figuras públicas y la necesidad imperativa de luchar contra tales prácticas para preservar la integridad y credibilidad de cada individuo.