Fatshimetrie, 29 y 24 de octubre – La limpieza de los espacios públicos es una cuestión importante para la comunidad de Kimbanseke, en Kinshasa. El jefe del distrito 17 Mai, Ferdinand Mbuku Muzama, expresó recientemente su legítima preocupación por la gestión de residuos en su región. De hecho, la basura que ensucia las calles del barrio plantea un creciente problema de insalubridad que requiere acción inmediata.
En un enfoque proactivo, el Sr. Muzama hizo varias solicitudes destinadas a mejorar la situación. Primero solicitó un servicio regular de evacuación de residuos en las avenidas de su barrio. Esta acción permitiría luchar contra las condiciones insalubres y devolver a Kimbanseke un entorno de vida más agradable. Además, el jefe vecinal abogó por la instalación de contenedores de basura en cada sector del municipio, con el fin de facilitar la clasificación y recolección de residuos por parte de los vecinos.
Otra propuesta interesante del señor Muzama es la reactivación del servicio de higiene en el programa de saneamiento urbano. Subrayó el papel crucial que este servicio desempeñó en el pasado en la gestión de residuos y lamentó su práctica ausencia actual. Involucrando nuevamente a este servicio en las operaciones de limpieza, es posible establecer una cultura de limpieza y responsabilidad dentro de la población.
Además, el jefe del vecindario invitó a los residentes de Kimbanseke a participar activamente en los esfuerzos de saneamiento participando en acciones de limpieza periódicas. En particular, mencionó la creación de un salón semanal donde los residentes se movilizarían para mantener la limpieza frente a sus casas. Este enfoque colectivo fortalecería el sentimiento de pertenencia a la comunidad y trabajar juntos por un medio ambiente más saludable.
La situación insalubre es un gran desafío para la ciudad de Kinshasa, donde se acumulan montañas de basura debido a la falta de recogida regular. Para remediar este problema, el gobernador de la ciudad lanzó la operación «punch», cuyo objetivo es librar a la capital de estos voluminosos residuos. También se prometieron medidas concretas, como la instalación de contenedores de basura, para mejorar la gestión de residuos a escala urbana.
En resumen, el llamamiento de Ferdinand Mbuku Muzama a una acción concertada para lograr la limpieza y el saneamiento en Kimbanseke es loable y urgente. Es imperativo que las autoridades locales y la población colaboren estrechamente para establecer prácticas sostenibles de gestión de residuos y preservar la salud y el bienestar de los residentes locales. El futuro de Kimbanseke depende del compromiso de todos para preservar su medio ambiente y trabajar juntos para lograr un entorno de vida más saludable y agradable.