El gesto humanitario del gobierno provincial de Kivu del Norte en noviembre de 2024 hacia los reclusos de la prisión central de Goma demuestra una respuesta crucial a una situación preocupante. La entrega de un stock de alimentos y medicinas, que incluía entre otros 200 sacos de harina de maíz, 10 sacos de frijoles, 10 latas de aceite y 5 paquetes de sal, era una necesidad dada la prolongada falta de estos suministros esenciales para más de 4.000 reclusos. de la prisión.
Este gesto humanitario, orquestado por Prisca Luanda Kamala, asesora principal del gobernador militar, resultó ser un soplo de aire fresco para una institución penitenciaria azotada por condiciones de vida extremadamente difíciles desde hace varios meses. De hecho, el período de escasez se vio agravado por la retirada de los socios humanitarios que anteriormente proporcionaban alimentos y atención médica a los detenidos.
La declaración de Prisca Luanda Kamala destaca el compromiso de la autoridad provincial, el general de división Peter Cirimwami Nkuba, de responder eficazmente a las llamadas de ayuda de los detenidos. Esta acción saludable ilustra el deseo de las autoridades locales de prestar asistencia a las personas encarceladas, a menudo olvidadas por la sociedad.
El director de la prisión de Munzenze, reconociendo la importancia de esta intervención gubernamental, destacó la necesidad de pensar en soluciones para aliviar la congestión en el establecimiento penitenciario. De hecho, el hacinamiento carcelario constituye un desafío importante en África y requiere iniciativas concertadas para garantizar condiciones de detención dignas que respeten los derechos fundamentales de los presos.
En conclusión, esta iniciativa humanitaria demuestra la importancia de la solidaridad y el compromiso de las autoridades públicas para mejorar las condiciones de vida de los presos en prisión. Es imperativo seguir trabajando por una justicia más humana y equitativa, donde cada individuo, incluso encarcelado, sea tratado con dignidad y humanidad.