¿Por qué la candidatura de la democracia de Umaro Sissoco en Guinea-Bissau?


** Intrigue político en Guinea-Bissau: entre crisis constitucional y aspiraciones democráticas **

En el corazón de Guinea-Bissau, la decisión de los paquetes de Umaro Sissoco es un candidato para un segundo término despierta una tormenta política y una fractura inquietante entre el poder en su lugar y la oposición. Esta elección, lejos de ser una simple formalidad electoral, es parte de un contexto de tensiones palpables que sacuden la estabilidad del país. Desde su aumento del poder en 2020, que ya se ha visto empañado por la controversia electoral, Pacheó parece participar en el camino de una deriva que podría tener profundas consecuencias en la democracia guineana.

** Las raíces de la crisis: un mandato en disputa **

El Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (PAIGC) pone en tela de juicio la legitimidad del empaque, argumentando que su mandato debería haber terminado el 27 de febrero de 2025. La intervención de la Corte Suprema, que extendió esta fecha límite para el 4 de septiembre, plantea dudas sobre la independencia judicial en un país ya infundido por una historia de antecedentes y no estables. La declaración del Presidente del PAIGC, Domingos Simões Pereira, arroja luz sobre las crecientes preocupaciones: «Lo que se llama una decisión de la Corte Suprema fue solo la firma de uno de los jueces que siguieron las órdenes». Tal acusación revela una posible maniobra para controlar las instituciones por parte del Presidente, una dinámica que recuerda a otros regímenes en África occidental.

La situación en Guinea-Bissau nos recuerda el caso de Malí, donde los líderes militares, después de haber tomado el poder, también trataron de abrirse paso a través de elecciones en disputa mientras fortalecían su control sobre las instituciones estatales. Es crucial analizar la voluntad política del empaque a la luz de estos ejemplos, porque podría definir una tendencia más amplia en el continente.

** Un equilibrio en el peligro: el papel de Cédéao **

La decisión tomada por Packó de Sommer, los mediadores de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (Cedeao) de abandonar el país, es una señal alarmante sobre el futuro del diálogo político. La institución regional, que anteriormente apoyó la elección de paquetes a pesar de las disputas que lo rodearon, se encuentra en una encrucijada delicada. Para Domingos Simões Pereira, esta situación representa un fracaso programado, especialmente porque el apoyo pasado del Cédéao pareció legitimar acciones controvertidas que hoy amenazan la paz política en Guinea-Bissau.

El resaltado de los cuerpos de soberanía como comisión permanente de la popular Asamblea Nacional es esencial, pero esto requiere un cambio de paradigma por parte del Cédéao. ¿Debería la organización continuar apoyando a un presidente visto por muchos como un autócrata en el poder, o debería comprometerse a fortalecer las instituciones democráticas del país, incluso a costa del apoyo a corto plazo?

** Estadísticas y democracia: la necesidad de un marco electoral sólido **

Para comprender mejor el contexto actual, es necesario abordar la cuestión electoral con una perspectiva analítica. Según los datos del Instituto Nacional de Estadísticas, Guinea-Bissau registró una tasa de participación electoral de solo 37.7 % en las elecciones generales de 2019. Si la población percibe las próximas elecciones como un simulacro de la democracia, es obvio que la candidatura de Packó solo aumentará este escepticismo.

El trabajo de investigación sobre la comparación de las elecciones en África occidental revela que los estados con ejecutivos electorales sólidos e instituciones judiciales independientes están experimentando tasas de participación más altas y resultados electorales más aceptados. Esto plantea una pregunta crucial: ¿qué mecanismos se pueden establecer para garantizar que las próximas elecciones sean percibidas como legítimas por el pueblo guineano?

** Conclusión: hacia un futuro incierto **

Guinea-Bissau está en la encrucijada. La candidatura de Umaro Sissoco para un segundo mandato, lejos de ser un evento político simple, podría simbolizar la apertura de un período oscuro para el país. La aspiración de una democracia real se basa en la capacidad de la población y los actores políticos para unirse en torno a un proyecto común, que va más allá de los intereses partidistas.

De esta crisis podría surgir una oportunidad única para redefinir las relaciones entre el estado y sus ciudadanos, pero esto requerirá una vigilancia activa y un compromiso concreto por parte de los actores regionales e internacionales. Como señaló Domingos Simões Pereira, es imperativo que el Cédéao reconsidera su papel para detener los problemas democráticos reales en Guinea-Bissau, al tiempo que garantiza que la voz de la gente no sea sofocada por maniobras autoritarias. Este camino hacia la democracia estará cubierto de dificultades, pero es esencial garantizar un futuro pacífico y próspero en Guinea-Bissau.

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