El reciente aumento de las actividades delictivas relacionadas con los enfrentamientos entre diferentes hermandades en la ciudad de Eket ha provocado una respuesta inmediata de las autoridades policiales. De hecho, el portavoz de Relaciones Públicas de la Policía (PPRP), ASP Timfon John, reveló recientemente que varios sospechosos implicados en estos conflictos entre bandas han sido detenidos.
Según ASP Timfon John, las detenciones se produjeron tras denuncias de enfrentamientos entre bandas rivales en Eket. Se elogió la prontitud de los organismos encargados de hacer cumplir la ley al responder a estas denuncias, y el comisionado de policía estatal, CP Waheed Ayilara, emitió órdenes para arrestar a todas las personas involucradas en estas disputas.
Una operación llevada a cabo el 9 de abril resultó en la detención de los sospechosos, durante la cual se recuperaron armas y municiones. Entre los elementos incautados se encontraba una escopeta de acción de bombeo, una metralleta de corto alcance y una pistola revólver de fabricación casera. Además, la policía incautó 11 balas calibre 9 mm y cuatro cartuchos de munición aún listos para su uso.
Durante el interrogatorio, los sospechosos confesaron pertenecer a Black Axe Brotherhood, un grupo que se cree que está involucrado en el asesinato de Kufre Usoro, de 32 años. Esta confesión refuerza la gravedad de las actividades criminales perpetradas por estos miembros de la hermandad en la región de Eket.
En otro caso relacionado, el 25 de abril fue detenido otro individuo sospechoso de pertenecer a una hermandad. Confesó ser el líder de un grupo de la Hermandad del Hacha Negra que ha estado aterrorizando las ciudades de Eket, Etinan y Ekparakwa en el estado.
Esta serie de arrestos e incautaciones de armas subraya el compromiso de las fuerzas del orden con el mantenimiento de la paz y la seguridad en la región. Los esfuerzos de la policía para desmantelar estos grupos criminales y poner fin a los enfrentamientos entre hermandades son esenciales para garantizar la seguridad de los residentes de Eket y sus alrededores. Será necesaria una vigilancia continua y la cooperación comunitaria para prevenir incidentes de este tipo en el futuro y garantizar la paz pública.