En el centro de la actualidad política en la República Democrática del Congo, está surgiendo una ola de especulaciones y preocupaciones tras las declaraciones del Presidente Félix Tshisekedi sobre una posible revisión de la Constitución. Durante su reciente gira por Europa, el presidente congoleño sembró dudas al anunciar la creación de una comisión encargada de reflexionar sobre una nueva Constitución. Esta declaración provocó fuertes reacciones dentro de la oposición y la sociedad civil, poniendo de relieve los problemas políticos e institucionales del país.
Ante las preguntas de la diáspora en Bruselas, el presidente Tshisekedi no cerró la puerta a la reforma constitucional, argumentando la necesidad de una Constitución «digna de nuestro país». Sin embargo, estas declaraciones inmediatamente despertaron temores sobre un posible deseo de extender el mandato presidencial, hipótesis rechazada categóricamente por la oposición. Para algunos observadores, este anuncio podría poner en duda los logros democráticos y debilitar los principios de alternancia política.
Christian Mwando, figura destacada de la oposición parlamentaria, denuncia enérgicamente esta iniciativa, que considera un intento encubierto de conseguir un tercer mandato. Según él, el Presidente Tshisekedi debe asumir sus responsabilidades respetando las normas establecidas, sin intentar modificar la Constitución para sus intereses personales. Por su parte, Jean-Claude Katende, de Asadho, advierte contra las consecuencias de una reforma de este tipo, destacando que cualquier debilitamiento de las instituciones y de los fundamentos democráticos podría debilitar la estabilidad del país.
Desde su reelección el pasado mes de enero para un segundo mandato, Félix Tshisekedi ha expresado repetidamente su frustración por las limitaciones constitucionales que obstaculizan el establecimiento de instituciones políticas. Los retrasos en la formación del gobierno y los bloqueos institucionales se presentan a menudo como consecuencias de un marco jurídico considerado inadecuado. Sin embargo, la tentación de revisar la Constitución plantea preguntas legítimas sobre las motivaciones y consecuencias políticas de este enfoque.
En conclusión, el anuncio del Presidente Tshisekedi sobre una posible revisión de la Constitución abre un debate crucial sobre el futuro de la democracia en la República Democrática del Congo. Mientras el país atraviesa un período de transición política e institucional, la necesidad de garantizar el respeto de las reglas democráticas y los principios de buena gobernanza sigue siendo esencial para garantizar la estabilidad y el progreso del país.