Este día 13 de mayo, la región de Masisi, en Kivu del Norte, vuelve a ser escenario de violentos enfrentamientos entre rebeldes del M23 y grupos armados locales. En las aldeas de Kataato, Luke, Kabingu y Kwirambo resuenan disparos de armas pesadas y ligeras, sumiendo a la población en el terror y la incertidumbre.
Según información procedente del terreno, los combates, que comenzaron el fin de semana anterior, continúan con una intensidad preocupante. Las aldeas de la región van quedando poco a poco desiertas y sus habitantes huyen para escapar de los estragos de la violencia. Donatien Kibuya Kahima, presidente de la juventud Tembo de Kivu del Norte, da testimonio del sufrimiento de esta población desarraigada: “Los habitantes del primer grupo Ufamandu están huyendo de su entorno. Están las poblaciones de Miyano, Kashukano, Burora, Kihundu y Remeka, que se dirigen hacia Walikale y Ziralo (Kivu del Sur, ndr) y otras hacia Biriko. Los niños que tomaron las pruebas preliminares (para el examen estatal) también están dispersos”.
Estos dramáticos acontecimientos ponen de relieve una terrible realidad: la inseguridad que azota esta región de Kivu del Norte sigue ensangrentando el territorio de Masisi. Las fuerzas del M23, apoyadas por grupos armados, avanzan progresivamente hacia varias aldeas de las agrupaciones de Mufuni, Ufamandu y Buabo, dejando tras de sí una estela de destrucción y desolación.
Ante esta situación crítica, no se puede ignorar el llamamiento de Donatien Kibuya Kahima al Gobierno para que ponga fin a esta espiral de violencia. Es imperativo que se adopten medidas concretas para proteger a la población civil y poner fin a estos enfrentamientos mortales.
En conclusión, estos acontecimientos recientes son un firme recordatorio de la necesidad de trabajar por la paz y la estabilidad en la región de Kivu del Norte. Es urgente actuar para proteger a las poblaciones civiles inocentes atrapadas en esta violencia sin sentido. Es hora de poner fin a esta tragedia humana y construir un futuro más seguro y pacífico para todos los habitantes de la región.