El himno nacional es un poderoso símbolo de identidad nacional y unidad de cualquier país. En Nigeria, una decisión reciente ha reavivado los debates en torno a este emblema simbólico al restaurar el antiguo himno nacional, «Nigeria We Hail Thee», en sustitución del adoptado en 1978, «Levántate, oh compatriotas».
Esta decisión provocó diversas reacciones dentro de la sociedad nigeriana. Algunos ven el cambio como un regreso a lo básico, una reconexión con el patrimonio nacional y una celebración de la historia del país desde su independencia en 1960. El antiguo himno, escrito por Lillian Jean Williams y compuesto por Frances Berda, jugó un papel vital en la creación de un una fuerte identidad nacional y promoviendo la unidad durante los años 1960 y 1970.
Por otro lado, algunas voces se alzaron para criticar la decisión, argumentando que el nuevo himno nacional, «Levántense, oh compatriotas», refleja mejor los valores y aspiraciones actuales de Nigeria. Destacan la importancia de mirar hacia el futuro y crear un himno que encarne los desafíos y ambiciones del país en el siglo XXI.
De todos modos, el debate sobre el himno nacional de Nigeria resalta la importancia de los símbolos nacionales en la construcción de la identidad nacional. Estos símbolos, ya sea el himno nacional, la bandera o el escudo nacional, son elementos esenciales que unen a los ciudadanos en torno a valores comunes y les ayudan a sentirse parte de una misma comunidad.
En última instancia, ya sea “Nigeria We Hail Thee” o “Levántate, oh compatriotas”, la conclusión es que el himno nacional encarna los valores, las aspiraciones y la unidad del pueblo nigeriano. Independientemente de la elección final, lo importante es que este himno sea significativo y contribuya a fortalecer el sentido de pertenencia y el orgullo nacional entre todos los nigerianos.