La energía solar sigue ganando terreno en el panorama energético global, con proyectos cada vez más ambiciosos e innovadores. Es el caso de la planta solar de Kom Ombo, en Egipto, encargada recientemente por la empresa ACWA Power. Este proyecto de gran escala, con una capacidad de producción de 200 megavatios, es un paso importante en la transición hacia las energías renovables en la región.
Situada en la región de Kom Ombo, en el Alto Egipto, esta planta de energía solar es una proeza tecnológica y medioambiental. Con 387.465 paneles solares de última tecnología bifásica, cubre una superficie de 4,8 kilómetros cuadrados. Esta impresionante infraestructura no sólo es capaz de producir 200 megavatios de energía limpia, sino que también ayuda a reducir la huella de carbono de la región, reduciendo las emisiones de CO2 en casi 280.000 toneladas al año.
Esta planta de energía solar está conectada a la red nacional a través de una estación de interconexión 33/220 kV, que la conecta con las estaciones transformadoras de West Silwa y Benban I. El posicionamiento estratégico de la planta, a menos de 20 kilómetros del parque solar más grande de África El complejo Benban refuerza aún más su impacto en el sector de energía renovable de Egipto.
El proyecto de la planta de energía solar de Kom Ombo es el resultado de una inversión total de 611 millones de riales sauditas, parte de un acuerdo de 25 años con la empresa egipcia de transmisión de electricidad. ACWA Power, propietaria del 100 % del proyecto, espera un impacto financiero positivo ya en el tercer trimestre de 2024, lo que marcará el inicio de una nueva era en la producción de energía limpia en Egipto.
Este proyecto demuestra la creciente apuesta por las energías renovables y la transición hacia un futuro más sostenible. La planta de energía solar de Kom Ombo representa no sólo avances tecnológicos, sino también esfuerzos concretos para reducir el impacto ambiental y promover una economía basada en fuentes de energía alternativas y respetuosas con el medio ambiente.