La evolución del sistema de gobierno en Nigeria: una perspectiva regional
El futuro político de Nigeria está en plena discusión con la propuesta de creación de nuevos estados, en particular el de Etiti. Esta iniciativa, apoyada por algunos diputados, está suscitando apasionados debates sobre su impacto en la gobernanza y el desarrollo regional. Sin embargo, el eminente abogado y ex presidente del Colegio de Abogados de Nigeria, Sr. Agbakoba, plantea una pregunta aún más profunda: ¿Nigeria realmente necesita más estados?
En una entrevista reciente, Agbakoba expresó su opinión de que Nigeria debería considerar la reestructuración hacia un sistema regional que refleje la verdadera diversidad del país. Destaca la viabilidad económica de los estados actuales, enfatizando que la mayoría de ellos no son capaces de satisfacer sus necesidades financieras ni apoyar el desarrollo de infraestructura sostenible.
Contrariamente a la propuesta de creación de un nuevo Estado, Agbakoba sostiene firmemente que se debe dar prioridad a la creación de un sistema de gobierno regional. Aboga por reducir el número de estados para agruparlos en seis a ocho regiones o zonas geopolíticas, cada una encabezada por un líder. Este modelo, basado en experiencias pasadas de gobernanza regional exitosa en Nigeria, permitiría una gestión más eficaz de los recursos y las necesidades específicas de cada región.
Al abogar por un retorno a la regionalización, Agbakoba destaca los beneficios potenciales de dicha reforma. Señala que Nigeria alguna vez prosperó bajo ese sistema, con figuras influyentes como el jefe Obafemi Awolowo en el suroeste, el jefe Michael Okpara en el sureste y Ahmadu Bello en el norte. Según él, este enfoque fortalecería las regiones frágiles y promovería un crecimiento económico más equilibrado a escala nacional.
El argumento de Agbakoba se basa en un análisis crítico de la situación actual de Nigeria, destacando los desafíos socioeconómicos y políticos que enfrenta el país. En lugar de centrarse en la creación de nuevos estados, aboga por una reforma estructural profunda para satisfacer las necesidades reales de la población y garantizar un desarrollo sostenible a largo plazo.
En conclusión, la visión de Agbakoba para el futuro de Nigeria se basa en un enfoque audaz e innovador. Al abogar por un sistema de gobierno regional, allana el camino para un pensamiento más amplio sobre cómo el país puede superar sus desafíos actuales y avanzar hacia un futuro más prometedor. Su propuesta exige repensar la gobernanza y considerar nuevos caminos para construir una Nigeria más fuerte y próspera para todos sus ciudadanos.