El calor sofocante alcanzó recientemente máximos históricos, y el lunes se convirtió en el día más caluroso registrado a nivel mundial, superando el récord establecido el día anterior. Según el Servicio Europeo de Cambio Climático, los datos provisionales de satélite publicados por Copernicus muestran que el lunes fue 0,06 grados centígrados más cálido que el domingo anterior.
Los científicos del clima señalan que el aumento de las temperaturas observado en las últimas décadas es consistente con las proyecciones vinculadas al calentamiento global causado por el hombre, resultado del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Las temperaturas medias actuales no han sido tan altas desde antes del surgimiento de la agricultura.
Según los expertos, aunque no es posible decir con certeza que el lunes fue el día más caluroso durante este período, las temperaturas medias no han sido tan altas desde hace unos 120.000 años debido al cambio climático provocado por el hombre.
La temperatura media global registrada el lunes fue de 17,15 grados centígrados. Antes de este nuevo récord, se había batido el del año anterior. Una anomalía en el invierno antártico, más cálido de lo normal, contribuyó al calor sin precedentes, al igual que el año anterior, cuando se estableció el récord en julio.
Los científicos estiman que sin el cambio climático causado por el hombre, sería mucho menos probable que se batieran récords de temperaturas extremas con tanta frecuencia como en los últimos años. La magnitud de estas olas de calor se ha convertido en un fenómeno extraordinario, especialmente si se considera que ocurren en dos años consecutivos, a pesar del fin del evento natural de El Niño que calienta el Océano Pacífico central.
África se ha visto particularmente afectada por olas de calor extremas, que han provocado sequías en países como Marruecos, Zimbabwe y Zambia. Las temperaturas alcanzaron alturas alarmantes, rozando los 50 grados centígrados.
Esta alarmante tendencia debe tomarse en serio, ya que estas condiciones climáticas extremas amenazan gravemente la salud humana, el medio ambiente y la biodiversidad. Existe una necesidad urgente de fortalecer las acciones para combatir el cambio climático y mitigar sus efectos devastadores. Sólo una acción concertada a nivel mundial puede limitar las desastrosas consecuencias de estos récords de calor que demuestran la urgencia de la crisis climática que debemos afrontar colectivamente.