Durante la reciente conmemoración del Día de Genocost en Kisangani, Bruno Lemarquis, Representante Especial Adjunto del Secretario General de la ONU en la República Democrática del Congo, destacó las desastrosas consecuencias del conflicto en curso en el este de la República Democrática del Congo. Subrayó la magnitud de la tragedia que sigue afectando a la población congoleña, provocando millones de pérdidas humanas y obligando a 7,3 millones de personas a huir dentro del país. Ante esta crisis humanitaria sin precedentes, Lemarquis lanzó un llamamiento urgente para detener esta hemorragia que está desangrando al país.
Según él, para poner fin a esta crisis es imperativo restablecer la autoridad y la soberanía del Estado congoleño mediante un proceso económico sólido. También subrayó la importancia de promover la transparencia económica y una gobernanza inclusiva y responsable para fortalecer los cimientos de la sociedad congoleña. Además, insistió en la necesidad de desarmar a los grupos armados y promover su reintegración social para establecer una paz duradera en la región.
Lemarquis destacó la necesidad de abordar las causas fundamentales del conflicto, incluida la explotación ilícita de los recursos naturales y los flujos financieros clandestinos que alimentan la violencia. Destacó que esto requerirá un esfuerzo concertado de todas las partes interesadas involucradas, en todos los niveles. En este sentido, muchos de los socios de la República Democrática del Congo se están movilizando junto con el gobierno para trabajar en estas cuestiones cruciales, mientras que el sistema de las Naciones Unidas está dispuesto a brindar apoyo para fortalecer las iniciativas vigentes.
El conmovedor llamamiento de Bruno Lemarquis resuena como un grito de alarma para que se adopten medidas urgentes y coordinadas que pongan fin al sufrimiento del pueblo congoleño y construyan un futuro de paz y prosperidad para la región. Hay mucho en juego, pero el compromiso de los actores locales e internacionales es crucial para allanar el camino hacia un futuro mejor para la República Democrática del Congo.