Fatshimetrie – Los residentes de Maiduguri en alerta máxima porque el río Yedzaram alcanza niveles peligrosos
Los residentes a lo largo de las orillas del río Yedzaram en Maiduguri están actualmente en alerta máxima porque el río se ha desbordado, causando inundaciones en varias áreas de la ciudad. La situación se ha visto agravada aún más por los informes de que la presa Alau, que ahora está a plena capacidad, pronto podría liberar el exceso de agua en el río.
El impacto de las inundaciones ya se está sintiendo, con edificios y tierras de cultivo en el barrio de Gwange de Maiduguri sumergidos. Además, el arroyo Ngaddabul, que atraviesa la ciudad, también ha causado inundaciones en el barrio de Maduganari, desplazando a los residentes y causando daños a la propiedad.
Mustapha Ali, un residente de Gwange, expresó su preocupación por la situación y afirmó: «Estamos angustiados y tememos que más lluvias o la liberación del exceso de agua de la presa puedan provocar una mayor devastación. En zonas como la zona aduanera, la Facultad de Agricultura y 505 fincas ya se están produciendo graves inundaciones provocadas por los ríos”.
En el barrio de Bulabulin, Abubakar Ibrahim informó de que algunos residentes habían empezado a evacuar la zona, ya que las inundaciones seguían extendiéndose. “La situación en Bulabulin está empeorando, obligando a la gente a abandonar sus hogares”, afirmó.
Para hacer frente a la creciente crisis, el secretario del Gobierno del Estado de Borno, Alhaji Bukar Tijjani, visitó recientemente la presa de Alau para evaluar la situación y determinar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los residentes. Tijjani aseguró a los habitantes de Maiduguri que el gobierno estatal está colaborando con la Autoridad de Desarrollo de la Cuenca del Chad, que gestiona la presa, para aplicar medidas destinadas a mitigar el impacto de las inundaciones.
Las fuertes lluvias que cayeron recientemente en el estado de Borno también provocaron inundaciones importantes en otras áreas de gobierno local como Biu, Chibok, Konduga, Bama, Dikwa y Jere, lo que pone de relieve la necesidad urgente de coordinar esfuerzos de respuesta para abordar la devastación generalizada causada por el desastre natural.
La situación actual en Maiduguri es un duro recordatorio de la vulnerabilidad de las comunidades a los impactos del cambio climático y la necesidad urgente de adoptar medidas proactivas para mejorar la preparación y la resiliencia frente a fenómenos meteorológicos extremos. Mientras los residentes siguen lidiando con las consecuencias de las inundaciones, no se puede exagerar la importancia de contar con mecanismos de respuesta rápidos y eficaces para salvaguardar las vidas y los medios de subsistencia en la región.