«Fatshimetrie: los desafíos financieros de las autoridades locales en el Reino Unido
La situación financiera de las autoridades locales de Inglaterra, Escocia y Gales está actualmente en el punto de mira, con un déficit estimado de 4.300 millones de libras (5.600 millones de dólares) para el próximo año. Esta cifra, destacada por un nuevo informe, amenaza la estabilidad de los servicios públicos y podría provocar reducciones de personal y de actividades esenciales, como la recogida de residuos.
En una publicación reciente, Unison, el mayor sindicato del Reino Unido, advierte de un grave riesgo de fracaso generalizado de los gobiernos locales si no se asignan fondos de emergencia adicionales para cubrir este déficit previsto para el ejercicio 2025-26. El informe predice que el déficit de financiación podría alcanzar los 8.500 millones de libras esterlinas (11.100 millones de dólares) el año siguiente, socavando la viabilidad financiera de las autoridades locales.
La crisis financiera se produce mientras el recién elegido gobierno laborista del Reino Unido se prepara para revelar planes para la financiación de los gobiernos locales en su primer presupuesto el próximo mes, después de revelar un «agujero negro» financiero de £22 mil millones ($29 mil millones) en julio pasado.
Ante este importante desafío, muchas autoridades locales podrían verse obligadas a vender terrenos y edificios, así como a reducir sus servicios, como recogida de basuras, bibliotecas y aseos públicos, para cumplir con la obligación legal de equilibrar sus presupuestos.
El pasado mes de marzo, el ayuntamiento de Birmingham, la segunda ciudad más grande de Gran Bretaña después de Londres, aprobó una de las mayores rondas de recortes presupuestarios en la historia del gobierno local, incluida la pérdida de hasta 600 puestos de trabajo, recortes en la financiación de servicios sociales y para niños, así como como reducciones en la recogida de residuos.
Desde 2018, ocho ayuntamientos han emitido avisos de la “sección 114”, lo que significa que están efectivamente en quiebra. Esta crisis financiera amenaza los servicios esenciales y muchos empleos vitales, con consecuencias desastrosas para las comunidades de todo el Reino Unido. Después de 14 años de austeridad despiadada, el tejido mismo de la sociedad local está en peligro.
Entre 2010 y 2023, los ayuntamientos cerraron 1.243 centros juveniles y 1.168 centros infantiles, reduciendo el acceso a servicios gratuitos para jóvenes y familias. Según Unison, el número de baños públicos se redujo en 1.629 durante el mismo período y el número de bibliotecas administradas por el ayuntamiento se redujo en 1.376..
Ante estos recortes presupuestarios, el Ayuntamiento de Shropshire planea eliminar hasta 540 puestos de trabajo, mientras que el Consejo del Condado de Derbyshire ha propuesto cerrar hasta 11 residencias de ancianos. Por su parte, el Consejo del Condado de Hampshire tiene previsto suspender toda financiación para las personas sin hogar a partir del próximo marzo.
En este preocupante contexto, un portavoz del gobierno británico declaró que quería “volver a levantar los cimientos de las autoridades locales”. Se tomarán iniciativas para garantizar la estabilidad a largo plazo a través de acuerdos de financiación plurianuales, el fin de las licitaciones competitivas para subvenciones y la reforma del sistema de control de auditoría local.
David Phillips, director asociado del Instituto de Estudios Fiscales, destacó que la forma en que las autoridades locales calculan sus futuras necesidades financieras y, por tanto, sus déficits presupuestarios, es a menudo «opaca» y probablemente varíe de una región a otra. En este período delicado para las finanzas locales, es crucial encontrar soluciones sostenibles para garantizar la sostenibilidad de los servicios públicos y el bienestar de las comunidades locales».