Fatshimetrie, edición del 22 de septiembre de 2024 – Recientemente tuvo lugar en Bunia, en Ituri, una loable iniciativa encaminada a fortalecer las capacidades de los magistrados civiles y militares, así como de los abogados, en materia de derechos de las víctimas de violencia sexual en tiempos de conflicto. Esta formación, organizada por una estructura especializada en el apoyo a las personas afectadas por los conflictos, permitió intercambios enriquecedores y la implementación de estrategias destinadas a mejorar la respuesta jurídica a las necesidades de las víctimas.
Ernest Uringi Padolo, jefe de gabinete en funciones del gobernador militar de Ituri, subrayó la importancia de esta formación en términos de compartir conocimientos, intercambiar experiencias y desarrollar mecanismos legales eficaces. En particular, destacó el derecho de las víctimas a la reparación, al reconocimiento de su sufrimiento y al apoyo para reconstruir sus vidas después de atrocidades inaceptables como la violencia sexual relacionada con el conflicto.
Fonarev, que fue el origen de esta formación, recibió el agradecimiento y el aliento de Ernest Uringi por su compromiso con las víctimas y la justicia. Este último también elogió el trabajo de las autoridades judiciales civiles y militares, así como de los abogados de la provincia de Ituri, por su implicación en la asistencia a las víctimas y la aplicación de los principios fundamentales relacionados con la protección y reparación de las víctimas de la violencia sexual en los conflictos.
La formación, que reunió a 40 participantes, entre ellos magistrados y abogados militares y civiles, se desarrolló durante tres días. Su objetivo fue fortalecer las capacidades técnicas de los profesionales de la justicia en términos de apoyo a las víctimas y cooperación interinstitucional e interdisciplinaria.
Joseph Kasa, formador designado por el Consejo Superior del Poder Judicial, recordó a los participantes la importancia de su papel en el apoyo a las víctimas de violencia sexual y los animó a ser proactivos en la búsqueda de soluciones concretas.
En conclusión, esta iniciativa ilustra el compromiso de los actores de la justicia en la República Democrática del Congo para luchar contra la impunidad y garantizar el acceso a la justicia para las víctimas de violencia sexual en los conflictos. También da testimonio del deseo común de marcar una diferencia positiva en las vidas de quienes sufrieron esta violencia atroz.