Todas las miradas estaban puestas en el desempeño de los Leopardos Junior Sub-20 de la República Democrática del Congo cuando ingresaron al torneo zonal de la Unión de la Federación Centroafricana (UNIFFAC) para las eliminatorias de la Copa Africana de Naciones (CAN) U20 2025. Desafortunadamente, la noche no sonríe al joven equipo congoleño que se enfrentó a los Diablos Rojos del Congo Brazzaville durante un vibrante derbi.
Los pupilos de Guy Bukasa tuvieron dificultades para orientarse desde el saque inicial, lo que abrió el camino a una primera alerta en el minuto 28 de juego. Dechan Moussavou aprovechó para completar una acción bien ejecutada y poner a los Diablos Rojos en ventaja. Un gol merecido.
A pesar de una reacción más aguda en la segunda mitad, simbolizada por un disparo de Berdy Mavutuku repelido por el poste contrario, los Leopards lamentablemente no lograron encontrar la falta. La falta de realismo fue evidente y le costó cara a la selección congoleña, que no supo aprovechar las oportunidades que se le presentaron.
El realismo de cara a la portería será sin duda un aspecto clave en el que el equipo deberá trabajar de cara al próximo encuentro contra la selección guineana. Una victoria con un margen más cómodo será imprescindible para aspirar a posicionarse ventajosamente en el Grupo B y considerar la clasificación para las semifinales.
Esta primera salida abortada no debería empañar la determinación ni el entusiasmo de los jóvenes Leopardos de la República Democrática del Congo. El aprendizaje a menudo implica reveses que galvanizan a las tropas y las alientan a redoblar sus esfuerzos para recuperarse con garbo. El equipo congoleño está llamado a removilizarse, aprovechar sus recursos y revelar todo su potencial durante las próximas rondas.
En definitiva, todavía queda un largo camino por recorrer para los jóvenes Leopardos, pero la experiencia adquirida durante este primer partido constituirá sin duda una piedra angular en su progreso. Aún no hay nada decidido en esta competición y la esperanza permanece intacta para un equipo decidido a defender los colores de la República Democrática del Congo con fervor y orgullo.