Fatshimetria
En el corazón de los misterios políticos surgen declaraciones resonantes que a veces dan que pensar o dar motivo de diversión. Al recordar la reciente entrevista de Rabiu Musa Kwankwaso, ex gobernador del estado de Kano y líder del Nuevo Partido Popular Nigeriano (NNPP), uno no puede evitar sonreír ante sus audaces declaraciones.
En su entrevista, Kwankwaso se jacta de ser políticamente más importante que Peter Obi, candidato presidencial del Partido Laborista (LP) en las elecciones de 2023. Con un innegable sentido del ego, afirma ser el «hermano mayor» de Peter Obi, quien. Tiene un doctorado y superó este último cuando fue gobernador de su estado. Sin embargo, estas declaraciones son desconcertantes porque parecen estar teñidas de confusión, egoísmo y engaño.
Echemos un vistazo más de cerca a estas extravagantes afirmaciones. Kwankwaso afirma ser “más importante” que Peter Obi, pero las cifras oficiales de la Comisión Nacional Electoral Independiente (INEC) cuentan una historia diferente. En las elecciones presidenciales de febrero de 2023, Peter Obi consiguió el tercer puesto con 6.101.533 votos, mientras que Kwankwaso obtuvo unos modestos 1.496.687 votos, muy por detrás. ¿Cómo puede considerarse que un millón es “más grande” que seis millones, excepto en la delirante imaginación de Kwankwaso?
Además, Peter Obi llevó al LP a ganar siete escaños en el Senado, mientras que el partido de Kwankwaso obtuvo sólo dos, ambos de Kano. A nivel de la Cámara de Representantes, el LP obtuvo 36 diputados frente a 18 del NNPP, es decir, casi la mitad. Incluso el enemigo político de Obi, Nyesom Wike, admitió que Peter Obi era la clave para las elecciones generales de 2023.
La supuesta superioridad de Kwankwaso también se basa en criterios como la edad y el desempeño como gobernador. Sin embargo, la edad no es un factor determinante en la política, como lo demuestra el ejemplo de Joe Biden. Además, las acusaciones de Kwankwaso sobre su desempeño como gobernador son cuestionables, dados los notables logros de Peter Obi durante su mandato.
Curiosamente, a pesar de los logros educativos de Kwankwaso, Peter Obi pudo elevar a Anambra a la vanguardia en el desempeño de los exámenes, al tiempo que demostró integridad, frugalidad y sentido del deber ejemplares. Por el contrario, Kwankwaso parece más bien un político profesional cuya riqueza proviene de la política.
En última instancia, las diferencias entre Peter Obi y Rabiu Musa Kwankwaso son evidentes. Su visión y filosofía política divergen profundamente, lo que hace que su colaboración sea poco probable. Mientras Peter Obi encarna la integridad y el pragmatismo, Kwankwaso parece estar motivado por consideraciones partidistas y ambiciones personales..
En un escenario de coalición multipartidista, en el que Peter Obi sería elegido para liderar, es imperativo que pueda elegir a su propio vicepresidente. Una decisión así no puede imponerse y requiere un conjunto de valores y objetivos compartidos. En este sentido, el senador Yusuf Datti Baba-Ahmed parece una opción ideal, que combina patriotismo, inteligencia y compromiso con el progreso.
En conclusión, las afirmaciones de Kwankwaso hacia Peter Obi reflejan más una crisis de ego y una falta de realismo que una verdadera superioridad política. En el complejo escenario político de Nigeria, el liderazgo sincero, visionario y honesto de figuras como Peter Obi parece superar los cálculos partidistas y las ambiciones personales de políticos como Kwankwaso.