La dinámica del financiamiento de los países en desarrollo y de la deuda pública externa experimentó evoluciones significativas durante el año 2022. Según datos reportados por el Banco Mundial, los acreedores privados registraron un monto de 185 mil millones de dólares estadounidenses más para el pago de la deuda pública externa pagada por Estos países. Esta es la primera vez desde 2015 que los acreedores privados han recibido más fondos de los que inyectan en los países en desarrollo.
Sin embargo, este aumento de los pagos de la deuda estuvo acompañado de una disminución de los nuevos compromisos de préstamos externos a los países en desarrollo. De hecho, estos nuevos compromisos cayeron un 23%, alcanzando su nivel más bajo en diez años con un importe de 371 mil millones de dólares.
Esta reducción del crédito externo fue particularmente marcada para los países de bajos ingresos, cuya emisión de bonos cayó en más de tres cuartas partes. A medida que se agotó el financiamiento de los acreedores privados, los bancos multilaterales de desarrollo, como el Banco Mundial, tuvieron que intervenir para llenar el vacío.
Durante 2022, los acreedores multilaterales proporcionaron 115.000 millones de dólares en nueva financiación de bajo costo a los países en desarrollo, casi la mitad de los cuales provinieron del Banco Mundial. El financiamiento proporcionado por el Banco Mundial, a través de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), ha superado incluso los reembolsos de principal, alcanzando una cifra que casi triplica la registrada hace una década.
Para apoyar aún más a los países en desarrollo, el Banco Mundial también ha aumentado la cantidad de donaciones que les proporciona. En 2022, el Banco desembolsó 6.100 millones de dólares en donaciones a estos países, triplicando el monto otorgado diez años antes.
Estas cifras muestran la complejidad de la dinámica financiera en los países en desarrollo, con un aumento en los reembolsos de la deuda pública externa, pero también una disminución en los nuevos compromisos de préstamos. Por lo tanto, los bancos multilaterales desempeñan un papel crucial al proporcionar financiamiento y subvenciones de bajo costo para apoyar a estos países en su desarrollo económico.
Es importante enfatizar que estos datos no toman en cuenta las diferentes realidades y desafíos específicos de cada país en desarrollo. Sin embargo, resaltan la importancia de los flujos financieros y el apoyo externo en estos contextos, y la necesidad de encontrar soluciones sostenibles para garantizar una financiación adecuada de los proyectos de desarrollo.