Cuando dos países africanos vecinos, Kenia y Uganda, se unen para mejorar su infraestructura energética, sólo puede traer beneficios mutuos. Recientemente, el gobierno de Kenia anunció que otorgaría una licencia a la Compañía Nacional de Petróleo de Uganda (Unoc) para importar combustible directamente a través de la Compañía de Oleoductos de Kenia (KPC). Después de meses de litigio, esta decisión marca un paso crucial en la consolidación de las relaciones entre los dos países.
El secretario del Gabinete de Energía, Davis Chirchir, destacó que se estaba trabajando para otorgar el permiso a la ONUC. Esta colaboración permitirá a Unoc beneficiarse de la infraestructura de transporte de KPC, sin comprometer las oportunidades existentes. Al trabajar estrechamente, Kenia y Uganda buscan resolver los problemas que han obstaculizado esta prometedora asociación.
Esta disputa llegó a un punto de inflexión cuando, luego de recursos judiciales, los peticionarios retiraron su denuncia contra la Autoridad Reguladora de Energía y Petróleo (Epra). Ahora, las discusiones están girando hacia una cooperación más estrecha entre los dos países para hacer el mejor uso de los recursos disponibles.
El proyecto de importación directa de combustible de la ONUC se ha retrasado debido a la falta de cumplimiento de las normas establecidas por los reguladores de Kenia. Sin embargo, con este acuerdo de licencia, se espera que el proceso retome su curso y abra nuevas perspectivas para Uganda y Kenia.
Al mismo tiempo, Kenia también ha concertado acuerdos con importantes empresas energéticas del Golfo para importar combustible en condiciones financieras favorables, fortaleciendo así su posición económica regional.
Esta nueva cooperación energética entre Kenia y Uganda allana el camino para oportunidades de crecimiento y fortalecimiento mutuo, lo que refleja un enfoque proactivo en el desarrollo de infraestructura energética en África Oriental.