Fatshimetría, 3 de septiembre de 2024
En el centro de los problemas de salud materna en la República Democrática del Congo existe una necesidad urgente: el espaciamiento de los nacimientos. Esta cuestión crucial fue puesta de relieve recientemente durante una entrevista en Kinshasa con Marie-Jeanne Makusu, coordinadora de la ONG “Bon Départ”. Las palabras de la Sra. Makusu resuenan como un llamado urgente a la acción, destacando la preservación de las mujeres, las niñas y los recién nacidos como el objetivo principal de esta concienciación.
La importancia del espaciamiento de los nacimientos radica no sólo en reducir la mortalidad materna e infantil, sino también en preservar la salud general de las mujeres y sus hijos. Según las recomendaciones de Makusu, un intervalo de al menos dos años entre nacimientos es fundamental para permitir que la mujer se recupere física y emocionalmente, garantizando al mismo tiempo la supervivencia y el bienestar de sus hijos.
Las cifras hablan por sí solas: los bebés nacidos menos de dos años después de un parto anterior tienen el doble de riesgo de morir durante su primer año de vida que los nacidos tres años después. Estos datos resaltan el impacto crucial de la planificación familiar y el acceso a métodos anticonceptivos en la prevención de embarazos no deseados y abortos inseguros.
Al invertir en el espaciamiento de los nacimientos, no sólo se salvan vidas, sino que también se logran importantes ahorros en los ámbitos social, sanitario, educativo y medioambiental. Menos niños a los que educar significa recursos mejor distribuidos y una mejor calidad de vida para las familias congoleñas.
Sin embargo, concienciar y capacitar a las mujeres no es suficiente sin la participación de las autoridades y los socios de salud reproductiva. Es esencial que el gobierno y las organizaciones involucradas se movilicen para garantizar un acceso equitativo a los servicios de salud sexual y reproductiva, especialmente para las mujeres que viven en las zonas más remotas del país.
En última instancia, el espaciamiento de los nacimientos no es sólo una cuestión de salud pública, sino también un imperativo moral y social. Al proteger la salud y el bienestar de las mujeres y sus hijos, la sociedad congoleña está invirtiendo en un futuro más prometedor y más equilibrado para todos. Por lo tanto, es imperativo que continúe la sensibilización y se adopten medidas concretas para garantizar que cada mujer y niño tenga el “buen comienzo” que merece.
A través de estos esfuerzos colectivos, toda la comunidad congoleña se fortalece y florece, en una oleada de solidaridad y compromiso con un futuro mejor para todos.
Fatshimetrie, por un Congo más fuerte e ilustrado.
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Esta versión revisada pone mayor énfasis en la importancia del espaciamiento de los nacimientos, al tiempo que enfatiza el impacto positivo que puede tener en la sociedad congoleña en su conjunto. El artículo ofrece una perspectiva más amplia y abarcadora, destacando los múltiples y variados beneficios de dicha política de salud pública.